La arquitecta Elsa Urquijo ha dejado su impronta en todo el mundo. Muchas veces, de mano de Amancio Ortega; casi siempre, con el diseño de un nuevo concepto de tienda –conocidas como flagship stores– que se presta a acoger trazos irrepetibles. Los Zara más icónicos de Viena, Hong Kong o Berlín fueron alumbrados en su estudio. Pero su colaboración con el alma mater de Inditex va mucho más allá de la moda. En el año 2001, el empresario gallego impulsó una fundación con la que ha realizado múltiples proyectos de carácter social, educativo o de atención integral, y materializados con la cesión de escuelas infantiles, residencias de ancianos, equipos de detección de patologías oncológicas o material sanitario frente al COVID. Buena parte de estas infraestructuras fueron diseñadas por Urquijo.
Y ayer se celebró la entrega de la última: un nuevo centro de atención para personas con parálisis cerebral y trastornos neumotores, que será gestionado por la asociación Amencer-Aspace. La Fundación Amancio Ortega ha destinado más de nueve millones a su construcción y dotación, que será atendido por hasta 80 profesionales. Está en Bembrive, y será la vanguardia de una red con la que Amencer atiende ya a cerca de 120 usuarios. Cogerá músculo: el edificio tendrá capacidad para atender a hasta 150 personas para el área de rehabilitación, y otras 60 en la de educación especial.
“Esta dotación supone un reconocimiento por parte de la Fundación Amancio Ortega, a la labor del Amencer-Aspace”, valoró su presidente, Carlos Godoy. “Sin su apoyo, hubiera sido impensable para una asociación como la nuestra contar con un equipo robotizado de última generación”. El centro cuenta, por ejemplo, con un dispositivo de hipoterapia que imita los movimientos del caballo, para mejorar el control y la estabilidad de las personas con déficits neurológicos. Entre estos aparatos de vanguardia figura el llamado cough asisst, “utilizado para la eliminación de las secreciones bronquiales, simulando la tos natural del paciente. También una piscina multisensorial o sistemas de rehabilitación Rehawalk, de la más moderna tecnología disponible en el mercado.
El edificio incluye un centro de educación especial con capacidad para hasta 60 usuarios de entre 3 y 21 años, con diez aulas. “Amencer-Aspace son un motivo de confianza en una sociedad más justa y solidaria, por lo que estamos satisfechos de contribuir a mejorar la labor que realizan”, resumió el vicepresidente de la Fundación Amancio Ortega, José Arnau. También asistió la otra vicepresidenta de la entidad, Flora Pérez. Participaron asimismo el alcalde de Vigo, Abel Caballero, o la conselleira de Política Social, Fabiola García.
Los recursos
La atención a los usuarios con parálisis cerebral o trastornos neuromotores será específica por edades. El centro de rehabilitación tiene un departamento de atención temprana, para niños de cero a 6 años; a partir de esa edad, la terapia se centrará en que los usuarios “puedan alcanzar y mantener un nivel óptimo de desempeño físico, intelectual, sensorial, psicólogo y social”. Para la coordinadora técnica de esta nueva dotación, “el excelente equipo humano de Amencer en Vigo y el excepcional equipamiento tecnológico y los recursos del centro van a permitir a los usuarios avanzar muy significativamente en sus objetivos personales, un reto y un honor para todo el equipo que participa en este proyecto”.
El edificio se construyó sobre una parcela de suelo público, de 6.000 metros cuadrados, cedido por el Concello. “Sois un modelo en la forma de actuar y de trazar proyectos sociales, el modelo que corresponde al siglo XXI, en el que la cooperación y la responsabilidad social de las empresas debe ocupar todo el espacio”, enfatizó Abel Caballero.