El juicio por el soborno con prostitutas derivado de la “Operación Patos” que iba a celebrarse con jurado popular en Vigo se ha resuelto finalmente con una condena de conformidad que se zanjó en una breve vista celebrada esta mañana. Tras varias suspensiones anteriores y las gestiones que a requerimiento judicial y de la Policía Nacional de España se estaban realizando en Rumanía para tratar de localizar a una testigo clave, finalmente la negociación entre la Fiscalía y las defensas derivó en un acuerdo. El presunto líder de la trama, E.A.P., y un alto funcionario municipal, Á.C.C., aceptaron penas mínimas por este caso: fueron condenados por delito continuado de soborno a 4 meses y 15 días de prisión que se les sustituye por multa de 2.430 euros. Al empresario se le inhabilita cuatro meses y medio para el ejercicio de profesión relacionada con la construcción o la contratación pública. Y al funcionario, se le aplica la suspensión de empleo y cargo público por 10 meses. Se les benefició con la atenuante de dilaciones indebidas.

La vista se celebró en la Audiencia de Vigo. Esta es la ultima pieza separada de la “Patos” que estaba pendiente de juicio. Tras la avalancha de archivos judiciales en plena instrucción y alguna que otra sentencia absolutoria posterior, las únicas condenas de la “macroperación”, además de la de este caso de hoy, son las que se impusieron en otra pieza, la de Nigrán (que también fue una conformidad), y la relativa a unas obras en el campo de fútbol de Moraña, que está recurrida y en la que fueron condenados, entre otros, Rafael Louzán, expresidente de la Diputación Provincial de Pontevedra, y la exdelegada de la Xunta en Pontevedra, Luisa Piñeiro.