La Autoridad Portuaria de Vigo desplegó sus medios anticontaminación para poner a prueba su capacidad de respuesta ante un posible vertido en sus instalaciones. Activó su Plan Interior Marítimo en fase 1 y movilizó una barrera anticontaminación. El ejercicio, que se desarrolló durante una hora, aproximadamente, consistió en la simulación de un vertido accidental durante las operaciones de suministro a un buque a través de la toma fija que la empresa Cepsa tiene en la dársena 4 del puerto pesquero.