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La subida de casos COVID en Vigo se aceleró tras Semana Santa

Una enfermera vacuna a una mujer, la semana pasada, en el Ifevi. | // ALBA VILLAR

La tercera ola de esta pandemia frenó su desaceleración en la ciudad el 13 de abril. La incidencia registraba su nivel más bajo en el año con 78 nuevos casos por cien mil habitantes en 14 días. Desde entonces, la curva ha subido de forma lenta, pero constante. En la última semana, el número de nuevos diagnósticos de COVID –208, en total– fue un 29% mayor que en la semana anterior a las vacaciones de Semana Santa –del 22 al 29 de marzo, con 161 nuevos casos–.

Vigo presenta desde hace una semana la peor situación de las urbes gallegas y Sanidade ya advirtió la semana pasada que si su progresión seguía en la misma línea podrían plantearse un aumento de las restricciones en el comité clínico, que se reúne hoy. Sin embargo con 119 nuevos casos por cien mil habitantes en dos semanas, aún no supera el umbral para cambiar de nivel de restricciones –a partir de 150 pasaría de nivel bajo a nivel medio–. Tampoco con los datos de la incidencia acumulada (IA) a siete días. Aunque se acerca. Ayer era de 70. El Sergas multiplica esta cifra por dos (140) para estimar la evolución en la próxima semana y anticiparse con medidas.

La pandemia dio un respiro ayer en la urbe, con un descenso de cuatro puntos en la IA a 14 días. El alcalde, Abel Caballero, resaltó que esta bajada “neutraliza” la subida de los dos días anteriores. “La tendencia global de las ciudades es a subir y, en Vigo, ayer, bajó; este es el camino”, indicó.

La evolución del conjunto del área es algo diferente: empeoró tras el puente de San José, pero se contiene desde Semana Santa e, incluso, desciende ligeramente. Ayer estaba en 92 nuevos diagnósticos por cien mil habitantes a dos semanas. Aún está 19 puntos por encima de la media gallega, pero la pontevedresa le arrebató el domingo el farolillo rojo.

Inicio de la vacunación a grupos de riesgo

La campaña de vacunación dio ayer un nuevo paso con el inicio de la inmunización a los pacientes de riesgo. El Sergas comenzó con aquellos que acuden a diálisis y, en los próximos días, citará también a trasplantados, oncológicos hematológicos y oncológicos metastásicos.

Tras un parón de un día, se retoman hoy los pinchazos en el Ifevi con la convocatoria de 7.560 personas de entre 75 y 79 años para recibir la primera dosis de Pfizer. Mañana están llamadas otras dos mil.

De las 34.200 que fueron citadas la semana pasada en el Ifevi, acudieron el 81,6%. La participación es muy diferente según la marca del fármaco, pero también por la forma de llamar. De las personas de 60 a 65 años, a las que les corresponde AstraZeneca y solo recibieron un SMS en primera vuelta, acudió el 76,8% –12.833–. De 75 a 79 años, para Pfizer y citados con un SMS, una llamada robótica y, en algunos casos, otra de personal, subió al 86,2% –15.098–.

Habitaciones dobles de nuevo en el Meixoeiro

Por otra parte, el Sergas dio por concluido el brote en el Meixoeiro, que se declaró en el mes de enero y ha retirado la medida de mantener todas sus habitaciones individuales. Lo hace un mes después de registrarse el último caso y empieza por la quinta planta. Mantener los cuartos individuales suponía una limitación del número de ingresados en el Chuvi e impedía poner a pleno rendimiento todos los quirófanos.

El cribado en adolescentes quiere evitar brotes en institutos

Sanidade apuesta por seguir haciendo cribados porque son los infectados con COVID asintomáticos los que provocan la mayoría de brotes al desconocer su contagio. Pero, tal y como explica Silvia Suárez Luque, subdirectora de Saúde Pública, en la actualidad, no hay ningún grupo de edad que, llame la atención por el número de contagios. De ahí, que cuando decidieron organizar un nuevo reparto de kits de saliva para PCR a través de las farmacias de la provincia de Pontevedra, pensaron en los adolescentes de 12 a 17 años para evitar brotes en los centros educativos en el regreso de las vacaciones de Semana Santa.

“En vacaciones se rompieron un poco los grupos de convivencia de los centros educativos y el cribado permitiría evitar algunos brotes que se pudieran dar”, explica la doctora Suárez Luque. De entre todos los alumnos, se optó por los de Secundaria al ser “el grupo que más se mueve y se relaciona con sus amigos”. Subraya que no consideran que sea “un colectivo que se haya expuesto a un mayor riesgo”.

La iniciativa, en principio, durará dos semanas. Los kit se recogen en la farmacia –no es necesario que vaya el niño– y se entregan llenos al día siguiente antes de las 10.30. Los menores de 16 años necesitan el consentimiento de los padres. El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Pontevedra prepara una carta para remitir a los centros educativos y solicitar su colaboración para fomentar la participación. El Sergas también a avisado a Educación para ello.

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