Zona Franca desgrana los detalles del proyecto de fábrica de baterías con la que opta a fondos comunitarios New Generation. El delegado estatal, David Regades, acompañado por el alcalde y la presidenta de la Diputación, además de la directora del CTAG, presentó esta mañana en la sede del Consorcio, en Bouzas, algunas de las claves de la factoría con la que, explicó, el organismo busca reforzar la competitividad de la automoción y generar empleo en la comarca. Según detalló Regades, la fábrica de baterías sumará una inversión de 151,7 millones de euros y generará ya en su primera fase un centenar de empleos directos y un millar de indirectos. Cuando el complejo esté a pleno rendimiento se superarán los 800 y 8.000, respectivamente. Su capacidad de producción inicial alcanzará los 2 GWh, cifra que se multiplicará por ocho cuando la factoría esté perfectamente engrasada. En total su capacidad productiva se situará, avanzó el delegado del Consorcio estatal, en 300.000 baterías eléctricas al año.
Pata clave del proyecto son los laboratorios de tecnología y propulsión limpia, que servirán para la realización de pruebas y verificaciones de los productos finales. En sus instalaciones trabajará medio centenar de empleos directos y generarán, a su vez, 250 indirectos. La inversión global alcanzará los 30 millones de euros, fondos que permitirán activar media decena de laboratorios repartidos por la comarca. “Se trata de un proyecto estratégico para la transformación y recuperación económica. El objetivo es mejorar la competitividad de la industria y abastecer la demanda de baterías”, detalló Regades, quien presentó también el listado de organismos y empresas implicadas, entre las que se encuentran Iberdrola, GKN Automotive, Always On, Master Battery, URO o Seganosa, entre otras. “El papel protagonista lo tienen que tener las empresas”, remarcó Regades: “Tomamos esta iniciativa ante la inacción de la comunidad autónoma, que tendría que ser la que impulse estos planteamientos”.
Durante su intervención, la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, incidió en la importancia de la economía y el carácter “dinámico” del área de Vigo. El alcalde, Abel Caballero, recalcó a su vez que con la presentación se cierra la primera etapa del proyecto y arranca la segunda. El objetivo: acceder a los fondos comunitarios. “No es un proyecto contra nadie, sino impulsando la automoción. Esto es de la mayor importancia. Nace desde la concordia”, anotó el primer edil tras insistir en que “puede haber en Europa otros con la misma capacidad tecnológica que nosotros, pero no superior”. “Queremos cooperar y lo estamos haciendo. Tenemos diálogo abierto con el Gobierno de España”, incidió antes de recalcar que el proyecto goza de un “número importante” de apoyos y lamentar que quienes no lo impulsaron “generen debate político” ahora. La presentación oficial del proyecto de Vigo después de que el Gobierno haya anunciado la creación de un consorcio público-privado junto a Seat, Volkswagen e Iberdrola para la creación de una fábrica de baterías.
