La construcción de ascensores, escaleras y rampas mecánicas para salvar el desnivel existente entre las calles del casco urbano y fomentar la movilidad a pie, un modelo popularizado en la ciudad olívica y bautizado con el nombre de Vigo Vertical, está ganando adeptos más allá de las fronteras olívicas... y en formaciones políticas diferentes.
El Partido Popular de Santiago de Compostela presentará al gobierno local de la capital de Galicia la construcción de una rampa mecánica de unos 28 metros en la calle Santiago León de Caracas, en el entorno de la futura estación intermodal, de la que se podrían beneficiar usuarios de un centro de salud próximo, estudiantes y viajeros.
El proyecto anunciado por el grupo municipal del PP santiagués es mucho más sencillo que el que ya se ha hecho realidad en la calle Gran Vía de Vigo, premiado internacionalmente, ya que no cuenta con cubierta ni elementos vegetales, pero se concibe con objetivos similares. Según los populares de la capital gallega, uno de los beneficios que tendrán en común será la revitalización de la zona en la que se instalará, una realidad que ya se ha podido comprobar en la ciudad.
El último de los miembros anunciados para el club del Vigo Vertical ha sido la estructura propuesta para conectar peatonalmente la zona de García Barbón con Vialia y Vía Norte: un aro abierto, suspendido a 45 metros de altura, a modo de gran mirador sobre la urbe, sustentado por dos columnas con sendos ascensores, de 21 personas de capacidad, que sobrevolará la AP-9.
Esta obra es una muestra más de la apuesta del Concello de Vigo por la transformación de la ciudad en un lugar más preparado para las personas. Precisamente, ayer, el alcalde, Abel Caballero, informó que la entidad municipal ha adjudicado los trabajos de humanización de un segundo tramo de la calle Hispanidad –entre las calles Pintor Colmeiro y Zamora–, que dará continuidad a la primera fase ya completada –entre Zamora y la Gran Vía–. Con un presupuesto de unos 772.000 euros y un plazo estimado de ejecución de cuatro meses, se prevé ampliar aceras, crear pasos de peatones accesibles y zonas de estancia o retirar el arbolado actual –que será trasplantado en otro sitio– para poner nuevos ejemplares.
Además, el regidor anunció la licitación de la humanización de la calle Troncoso por 363.000 euros y tres meses de ejecución. Presumirá de aceras de granito, jardineras, arbolado e iluminación renovada.
El alcalde también aprovechó la jornada de ayer para visitar los 320 metros del nuevo cierre metálico del parque de Castrelos, que fue reparado por el Concello olívico con una inversión de unos 18.000 euros.
