Éramos pocos y... Eso debieron pensar los conductores que sobre las siete de la tarde de este martes tuvieron que sufrir un doble calvario en el desvío que lleva del tunel de O Folgoso -cerrado en sentido Ourense tras el incendio de un camión en su interior- hacia la N-120. Y es que justo antes del túnel, cuando comienza el desvío, en el estrecho vial que conduce hacia esa carretera, se produjo un gran colapso.

Al parecer, la presencia de un camión de piezas eólicas que se dirigía a Ourense tiene la culpa. El tráiler tuvo que permanecer un tiempo parado, con las consecuentes retenciones e indignación entre los usuarios de la carretera.

A esto se le añade la imposibilidad de adelantar, ya que los transportes especiales necesitan ocupar los dos carriles del vial, lo que obligó a los vehículosque le precedían a mantener la misma - lenta- velocidad a la que iba el tráiler.

Un problema añadido al que ya tienen de por sí, y tendrán durante meses, los conductores que circulen hacia Ourense, ya que deberán seguir desviándose desde la A-52 hacia Fontefría por la sinuosa, y maltrecha N-120.

Este recorrido, de unos 12 kilómetros por una vía nacional y que obliga a pasar también por el centro de A Cañiza, puede llegar a alargar el viaje hasta media hora en función de la densidad del tráfico, que en el caso de la circunstancia que se produjo esta tarde, sumó unos 30 minutos más a los indignados viajeros.