La falta de espacio es una sombra que acecha casi de forma endémica al Puerto de Vigo, agobiado por unas ansias de crecimiento que chocan con las limitaciones territoriales que imponen la urbe y el mar. Esa es una de las razones de que su Plan de Usos en plena tramitación apueste por conservar el dominio sobre sus 223 hectáreas actuales y limita a 25.000 metros cuadrados las cesiones a la ciudad, los Jardines del Arenal y la depuradora de Teis. Con la posibilidad de afrontar nuevos rellenos –esencialmente en Bouzas– aún lejana y en el aire por la frontal oposición municipal, la única opción que tiene la Autoridad Portuaria para ganar espacios es mirar dentro de lo que ya tiene. Por ello, el presidente de la Autoridad Portuaria, Jesús Vázquez Almuiña, ya tiene en marcha un plan para la posible reordenación de las instalaciones. “Trabajamos en una revisión de todo el Puerto con el fin de tener una imagen global de lo que se puede hacer, tratar de obtener más espacio y hacer frente a las limitaciones actuales”.
Dos informes previos
La Autoridad Portuaria dispone desde el pasado año de dos informes sobre el “uso efectivo del espacio portuario” referidos a los Muelles Comerciales y Guixar por un lado y a la terminal de Bouzas por el otro. Aunque estos documentos sirven de base para esta inspección, Almuiña quiere que este trabajo se extienda a la totalidad del recinto portuario. El objetivo final es “ver qué posibilidades hay de reordenar espacios mediante la búsqueda de zonas poco utilizadas, mover algún uso a corto plazo, recuperar terrenos y buscar alternativas”.
Una de las opciones sobre la mesa es negociar con algunas empresas con actividad poco relacionada con el mar y que tengan cerca el final de su concesión o autorización, para que se trasladen a otra ubicación fuera del Puerto, quizás a la Plisan. Almuiña admite, en todo caso, que esta posibilidad no sería la plena solución “porque muchas empresas tienen su radio de acción en la ciudad” y su mudanza a la plataforma logística de Salvaterra-As Neves no sería operativa.
Uno de los informes elaborados el pasado año, aún con Enrique López Veiga al timón de Praza da Estrela, para analizar estas carencias, ya apuntaba posibles opciones de recuperación de instalaciones. Se apuntaba a la playa de vías en la zona del Arenal, los terrenos que ocupaba Vulcano (un asunto ahora judicializado tras la compra del antiguo astillero, que el Puerto no ve claro) o incluso el traslado del centro social y el Archivo de la Autoridad Portuaria.
Un nuevo silo en Bouzas
Esta reordenación de espacios, como alternativa a la ejecución de nuevos rellenos en la ría, es una propuesta habitual del alcalde, Abel Caballero, que también ha planteado recientemente la posibilidad de que se amplíe el número de silos para automóviles en la terminal de Bouzas, de forma que se gane suelo en altura para este almacenamiento sin necesidad de ampliar terrenos a costa del mar.
Del mismo modo que se acepta, en la práctica, la opción municipal de reorganizar los terrenos actuales, también está sobre la mesa de la Autoridad Portuaria la segunda alternativa que planteó el regidor. Vázquez Almuiña no descarta la ejecución de un nuevo silo para coches en Bouzas. El actual tiene capacidad para al menos 10.000 vehículos en sus cuatro plantas, y un recinto gemelo permitiría elevar considerablemente la capacidad total de la terminal sin necesidad de terrenos añadidos.
El temporal frena la carga de coches y satura la terminal
La explanada de Bouzas repite las imágenes de finales de diciembre, con miles de coches almacenados a la espera de ser embarcados en los buques ro-ro. Sin embargo, si hace mes y medio aquella saturación se debía a las “prisas” por exportar vehículos al Reino Unido antes de la entrada el vigor del “Brexit”, la situación de ayer se debía a una causa más prosaica: el tren de borrascas que sacude estos días a Galicia y que impide la navegación normal de los mercantes. Las previsiones de atraque en Bouzas no se pueden cumplir al detalle, lo que genera retrasos en la estiba. En la tarde de ayer estaban atracados en Bouzas dos buques , uno de ellos con destino a Marruecos. Precisamente, la suspensión de la autopista del mar entre Vigo y Tánger, en el país alauita, se ve coyuntural en Praza da Estrela por la bajada de actividad en fábricas marroquíes a causa del COVID, por lo que se confía en su reanudación a corto plazo.
