Un septuagenario afronta 14 años acusado de abusar de dos menores tras engatusarlas

A una de las niñas, de 13 años, la engañó diciéndole que la ayudaría a ser modelo | Le pedía fotos y le hacía tocamientos dándole después dinero

Edificio de la Audiencia en Vigo. / J. Lores

Edificio de la Audiencia en Vigo. / J. Lores

Marta Fontán

Marta Fontán

Vigo

Un nuevo juicio por presuntos abusos sexuales en la Audiencia de Vigo. La vista se celebrará el lunes y en el banquillo se sentará un empresario jubilado acusado de abusar de dos menores de 13 y 14 años tras engatusarlas y llegar a prometerle a una de ellas que la ayudaría a ser modelo.

La Fiscalía atribuye a este septuagenario dos delitos continuados de abusos sexuales y uno más de tenencia ilícita de armas prohibidas, ya que en su oficina se halló un bastón pistola y 34 cartuchos. Por todo ello el hombre se enfrenta a 14 años de prisión, 6 de libertad vigilada y 10 de alejamiento con respecto a las presuntas víctimas, a las cuales se solicita que indemnice con 10.000 y 5.000 euros respectivamente por los perjuicios morales que les causó.

A raíz de la amistad que tenía con la madre, el acusado conoció a una de las víctimas, de 13 años, en 2014. El septuagenario se ofreció a llevar a la niña al colegio en su coche y, como ésta quería ser modelo, la acompañó a ella y a su progenitora a una agencia para que le hicieran fotos y le informaran. A partir de ahí el hombre supuestamente empezó a pedir a la adolescente que le enviara fotos por WhatsApp, con la excusa de enseñárselas a unos amigos que dijo que trabajaban en tele. Las imágenes que le solicitó fueron según el fiscal subiendo de tono, convenciendo a la niña pese a sus reticencias y dándole a cambio cuantías como 15 o 20 euros. De las fotos pasó a otros episodios en los que la sometió presuntamente a tocamientos. Advertía a la menor de que si se lo contaba a su madre, “ya no la ayudaría”.

Todo acabó en noviembre de 2016. Durante ese año supuestamente también abusó de una amiga de esta menor, a la cual también habría pedido fotos y realizado tocamientos. El hombre decía a las adolescentes que para ellas era un “amigo”.

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