El Concello planteará a la Xunta reforzar el mapa de Áreas de Rehabilitación Integral (ARIS), figura administrativa que facilita a los propietarios optar a ayudas para la modernización de sus viviendas, con cuatro nuevos puntos: grupos de inmuebles repartidos por Beiramar, San Pablo, San Roque y Espiñeiro. Del listado original diseñado en Praza do Rei se caen las residencias de Fenosa, en Teis, y las de A Salgueira. La razón, apuntan desde el Concello, es que la propuesta logre el visto bueno de la administración autonómica, que en noviembre de 2020 desestimó la propuesta inicial que las incluía junto a las cuatro restantes al considerar que, tal y como estaba planteada, no cumplía los requisitos que debe reunir las ARI.

Caballero tachó la decisión de la Xunta de “pésima” y recordó que las ayudas permiten rehabilitar inmuebles con décadas de antigüedad y que, con frecuencia, fueron promovidos por instituciones públicas a lo largo de la segunda mitad del siglo pasado. También apuntó que el programa recibirá fondos de la Unión Europea. “La Xunta, una vez más, desatiende las necesidades de esta ciudad. Dice que no a la rehabilitación de seis zonas importantes. ¿Es que la gente que vive en el grupo de San Pablo no tiene derechos?”, inquirió Caballero, quien avanzó que se dirigirá por escrito a los residentes de los diferentes barrios para trasladarles la situación de la propuesta de ARI.

El primer edil avanzó también que el lunes por la mañana se constituirá en el auditorio municipal de Vigo el jurado del concurso de ideas convocado por el Concello para escoger el diseño del elevador entre Vía Norte y García Barbón. Según precisó Caballero, el ascensor tendrá un presupuesto de más de siete millones de euros y -de cumplirse el cronograma desgranado hoy, que contempla un año de fase de ejecución- el mecanismo podría estar operativo en 2023. “Vamos a resolver la conexión entre dos zonas de la ciudad. Es una revolución”, reivindicó.