Tras agotarse los plazos legales para concurrir algún delito penal, el vecino afectado por los destrozos que varios menores habrían causado en su vivienda tras jugar a la güija en enero del año pasado ha iniciado acciones legales, pero por la vía civil. El afectado busca recuperar los costos de los destrozos en muebles y fotografías a causa del juego de los menores. Al tratarse los chicos de menores de edad, tendrán que ser sus padres los que se hagan cargo de la cuantía, que fuentes próximas al caso estimaron sobre los 2.000 euros.
