La Xunta aspira a conseguir 11 millones de los fondos europeos de recuperación para impulsar la transición energética del Parque Nacional Islas Atlánticas durante los próximos tres años. La propuesta, que ya ha sido trasladada al Gobierno central, incluye la implantación de energías renovables en los cuatro archipiélagos, lo que reduciría las emisiones en un 60% y ahorraría el consumo de 360.000 litros de gasóleo al año. Y contempla además la mejora de infraestructuras de uso público y la recuperación de hábitats y espacios.
El proyecto ha sido elaborado por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, a través de la dirección xeral de Patrimonio Natural, y es uno de los formulados desde Galicia para acceder al programa Next Generation, con el que la UE ayudará a reparar los daños causados por la pandemia.
La Xunta quiere que las energías limpias satisfagan el 100% de necesidades de todo el parque y crear una comunidad energética local renovable que contempla la movilidad eléctrica, la hibridación fotovoltaica con almacenamiento eléctrico y grupos de gas natural comprimido, la construcción de una red de distribución de energía eléctrica y la instalación de una red inteligente con almacenamiento de energía en baterías.
Además el sistema de tratamiento de aguas sería gestionado a través de nuevas tecnologías como el denominado internet de las cosas.
El proyecto plantea instalar paneles fotovoltaicos en los archipiélagos de Cíes y Ons, así como baterías de acumulación de energía y grupos electrógenos de gas natural comprimido y redes de distribución eléctrica inteligente. También se utilizarían calderas de biomasa y biocombustible para las calefacciones.
La movilidad se resolvería con un vehículo SUV y tractores eléctricos dotados de tecnología V2G (Vehicle to Grid), que permite usar las baterías como sistemas de almacenamiento eléctrico cuando están conectados a la red.
Respecto a las infraestructuras de uso público, el Gobierno gallego plantea la construcción de un campo de trabajo con las instalaciones necesarias para el desarrollo de actividades con alumnos y grupos de investigación científica. Asimismo, se llevarían a cabo mejoras en el centro de interpretación del Parque Islas Atlánticas.
La optimización del tratamiento de aguas residuales en los cuatro archipiélagos se alcanzaría con la construcción de nuevos sistemas de saneamiento y la mejora de los existentes, así como mediante la instalación de depuradoras más eficientes.
Otro de los retos es mejorar la biodiversidad de los ecosistemas asociados al parque y que mantengan la coherencia de la Red Natura 2000. El proyecto permitiría poner en marcha un plan de conservación de hábitats y especies que contemplaría la eliminación, control y contención local de especies de flora y fauna alóctona (introducidas), además de actuaciones de control de especies invasoras en el medio marino.
Dicho plan también fijaría acciones de restauración de hábitats y de conservación de poblaciones de interés comunitario, y la creación de viveros temporales para el cultivo y el desarrollo de especies autóctonas.
El Parque Nacional Islas Atlánticas es el principal espacio natural de Galicia, destaca la Xunta en su propuesta, y alberga “valores ambientales únicos”, además de ser el más visitado en toda la comunidad con cerca de 400.000 personas cada año.
La iniciativa del Gobierno gallego para recibir fondos europeos COVID responde a las cuatro líneas directrices que han sido establecidas para poder optar a ellos. Esto es, contribuir a la transición ecológica y a la digital, e impulsar la cohesión territorial y social, así como la igualdad y la lucha contra la brecha de género. Para lograr este último objetivo, el proyecto fomentará la estabilidad y la igualdad en los puestos de trabajo.
Precedentes
La autosuficiencia energética y las cero emisiones también constituyen el objetivo a lograr por otro proyecto ya en marcha, el Tutatis nZ0, lanzado en 2019 por la Autoridad Portuaria de Vigo en el marco del Blue Growth y con el apoyo de la Administración gallega.
La propuesta predecesora a la de la Xunta contemplaba alcanzar el 100% de la energía necesaria en los archipiélagos de Cíes y Ons con la instalación de paneles fotovoltaicos (70%) y el aprovechamiento maremotriz (30%).