Año nuevo, pero mismas precios tanto en el servicio de Vitrasa –por tercer año consecutivo– como en el sector del taxi. Es una de las tantas consecuencias que trae bajo el brazo la nueva normalidad en la que estamos instalados por causa de la pandemia del COVID-19. “No es momento de subir las tarifas”, destacó ayer el alcalde, Abel Caballero, en la primera rueda de prensa del año. Por su parte, el presidente de la cooperativa de los autopatronos, Manuel Chorén, señaló a FARO que el gremio “va a ser solidario con la ciudad” en un momento en el que “todos lo están pasando mal”.

De este modo, el billete ordinario para subirse al autobús urbano en Vigo seguirá costando 1,35 euros y el social, 0,69 euros; 0,89 el bonificado; 0,67 el de universitarios; y 0,86 el del resto de estudiantes. Los pensionistas y las personas con movilidad reducida, así como sus acompañantes, continuarán estando exentos del pago para utilizar este servicio público.

Mientras, en el sector del taxi, la bajada de bandera estándar seguirá en 3,75 euros –3,95 euros los domingos y festivos, 24 y 31 de diciembre, sábados desde las 6.00 y noches (de 22.00 a 6.00 horas)–. También se congelan los importes del suplemento para los viajes que se hacen al Ifevi –3,24 euros– y a Peinador –4,63–.

Preguntado por el contrato del agua, Caballero concretó que se ha apostado por ampliarlo por la existencia de “incertidumbres muy serias”: señaló “la propia competencia de la presa de Eiras” y el hecho de que permanezca en proceso la aprobación por parte de la Xunta de GAlicia de los planes de emergencia y normas de explotación del embalse de Zamáns, así como que no se haya finalizado el estudio técnico de la determinación de medidas para garantizar el abastecimiento de agua.

Al respecto, Marea de Vigo considera que la ampliación de la concesión es “la mayor chapuza de la democracia” y “un robo a manos llenas”. “El gobierno municipal paralizó deliberadamente el proceso de aprobación del nuevo sistema tarifario sin haber respondido a las alegaciones presentadas por los colectivos sociales y vecinales de la ciudad”, expone.