Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

“A mí me ayudaron, ahora es mi turno”

La vecina de Beade con parálisis a la que le robaron su scooter adaptada entrega todo lo recaudado al Banco de Alimentos después de que una pesquera le diera un nuevo vehículo

Ana Estévez, en su nueva moto adaptada, entrega ayer en el Banco de Alimentos de Vigo el dinero recaudado. | // ALBA VILLAR

A Ana Estévez le cambió la vida a finales del pasado noviembre. En un principio para mal. Y es que esta mujer de Beade que sufre una parálisis en todo el lado derecho a causa de un ictus sufrido hace cinco años, vivió un traumático episodio mientras visitaba a su hermano. Unos ladrones le robaron la moto adaptada que utilizaba para moverse y que había dejado aparcada en la calle. “Me arruinaron la vida”, había declarado a FARO por aquel entonces. Lo que no contaba, es que la publicación de la noticia en este periódico fuera a tener una repercusión tal para desatar una auténtica oleada de solidaridad de la sociedad viguesa y de toda Galicia. Llegaron propuestas de ayuda económica desde todas partes, centenares de personas querían el contacto de Ana para prestarle dinero y juntar lo suficiente para poder comprar una nueva moto, concretamente el mismo modelo que tenía, una scooter Leo de cuatro ruedas que está adaptada a personas con movilidad reducida. Esta precisamente es la parte buena de la historia: la impresionante solidaridad social, que desbordó completamente las expectativas de Ana y su familia. Sus excompañeras de trabajo de la residencia asistida del Meixoeiro empezaron una colecta para comprarle una moto en la que juntaron algo más de seiscientos euros.

A través de un grupo de Facebook, los familiares de Ana pidieron a la gente que quería ayudar que detuviese las donaciones porque una conocida empresa pesquera de Vigo se ofreció directamente a comprarle un modelo de moto adaptada igual al que le robaron. Porque ese era el único objetivo de Ana Estévez, tener de nuevo un vehículo que le permitiese moverse, porque sin él no podía salir de casa. La adquisición se produjo además en la misma tienda en la que ella había adquirido la suya, la que le robaron, años atrás: en el establecimiento vigués Ortopedias Iglesias.

  • La noticia del robo de la moto en FARO provocó una oleada de solidaridad

    FARO publicó el 29 de noviembre del año pasado que a Ana Estévez, con parálisis en el lado derecho a causa de un ictus, le habían robado su moto adaptada mientras visitaba a su hermano. “Me han arruinado la vida, ahora no puedo ni salir de casa”, afirmó en aquel entonces. La noticia tuvo una notable repercusión y disparó la solidaridad social para conseguirle cuanto antes un nuevo vehículo.

Por eso, cuando hace poco más de una semana recibieron la moto adaptada, Ana quiso devolver toda la solidaridad que recibió desde que trascendió lo que había ocurrido. Así, empezó a barajar opciones para donar el dinero que había recibido. Finalmente ella y su familia decidieron donarlo íntegramente al Banco de Alimentos de Vigo. Ayer la propia Ana acudió a la central de la entidad, en Lavadores, a entregar en efectivo los seiscientos euros que le habían donado.

Ana Estévez, en su nueva moto adaptada, entrega ayer en el Banco de Alimentos de Vigo el dinero recaudado

“Como una empresa ya me había dado la moto, yo también quería ayudar. No quería el dinero, ya tenía lo que necesitaba, y por eso decidí donarlo al Banco de Alimentos"

decoration

“Como una empresa ya me había dado la moto, yo también quería ayudar. No quería el dinero, ya tenía lo que necesitaba, y por eso decidí donarlo al Banco de Alimentos, que les vendrá muy bien para comprar comida y ayudar a las familias que lo necesiten”, aseguró Ana Estévez tras hacer entrega del dinero en un emotivo acto con los encargados y los voluntarios de la entidad solidaria.

Ana Estévez, en su nueva moto adaptada, entrega ayer en el Banco de Alimentos de Vigo el dinero recaudado

“Quiero dar las gracias a todos los que me ayudaron. La gente de Vigo ha demostrado que es muy solidaria y empática."

decoration

Esta viguesa vuelve a ser feliz después de que el robo le trastocara completamente su día a día. Sin su moto no podía salir de casa y dependía completamente de sus familiares para desplazarse. “Ahora ya puedo hacer lo que hacía antes. Voy al banco, a la farmacia... ¡Estoy muy contenta!”, clama emocionada. “Quiero dar las gracias a todos los que me ayudaron. La gente de Vigo ha demostrado que es muy solidaria y empática. Todo lo que ha pasado es muy emocionante”, afirma. Sobre la moto robada, no hay ninguna pista. “La debieron desmontar y vender por piezas, no se volvió a saber nada, pero afortunadamente todo se ha solucionado. La que me han dado es exactamente igual, del mismo color, y todos los que me ven andar con ella le llaman la roja, y a mí me gusta que mi moto tenga ese nombre porque yo soy de izquierdas.”, asegura.

Ana Estévez, en su nueva moto adaptada, entrega ayer en el Banco de Alimentos de Vigo el dinero recaudado

Compartir el artículo

stats