El alcalde, Abel Caballero, insistió ayer en el “éxito” de las rampas mecánicas de Gran Vía y se reafirma en trasladar Los Rederos a la glorieta de Isaac Peral, donde se levanta el Monumento a García Barbón, elaborado por Francisco Asorey hace casi un siglo. Caballero aboga por trasladar la obra de Asorey a su emplazamiento original, en las inmediaciones de la iglesia de Santiago –el monumento fue inaugurado por el rey Alfonso XIII en septiembre de 1927– para dejar sitio a Los Rederos.

Por su parte, el portavoz del PP, Alfonso Marnotes, defiende la continuidad del Monumento al Trabajo en Gran Vía y critica las rampas mecánicas por “impedir el paso de carritos de bebé y de sillas de ruedas”.