La pandemia por el nuevo coronavirus ha trastocado la vida de toda la población. Pero a unos colectivos les está golpeando con más fuerza que a otros. Las personas con adicción al alcohol están en el primer grupo. La Unidad de Conductas Adictivas de Vigo, Asvidal, alerta de un aumento de las recaídas, sobre todo, en menores de 45 años.

¿Por qué en esta franja de edad? Con las medidas de prevención y restricciones impuestas para frenar la expansión del SARS-CoV-2, la unidad se ha visto en la obligación de suspender sus actividades grupales sociolaborales o de ocio alternativo, sobre todo, entre la gente joven, que ahora se queda sin estas rutinas que fomentan un estilo de vida saludable. Y se ven aislados. Además, a esta franja de edad les está afectando con más virulencia las dificultades del mercado laboral.

La directora de Asvidal, Carmen Guimeráns Freijeiro, explica que la gente joven está más acostumbrada a beber en casa, con consumos de fin de semana que, con la disponibilidad de más tiempo, en algunos casos, se está extendiendo al resto de días. En cambio, los mayores tienen la adicción más vinculada a lo bares, “al chiquiteo”. Además, cuenta que están mas arropados en el hogar y con economías más “estructuradas”.

En Asvidal abordan las recaídas con un refuerzo del tratamiento en las terapias psicológicas que siguen estas personas. Se les cita con mayor frecuencia. Incluso hay gente que acude a diario, ya que los profesionales de la unidad le ayudan con la gestión de su dinero para evitar que lo destinen a bebida.

Guimeráns explica que en la unidad están “saturados” con la atención con “precauciones extra” por el Covid de sus casi 800 pacientes y con una media de entre 2 y 3 familiares por cada uno de ellos. Su apoyo abarca muchos ámbitos, como la búsqueda de ordenadores para los hijos de pacientes que, sin ser marginales, tienen dificultades para realizar estas inversiones.

Asvidal se alía con médicos de familia para prevenir el mal uso de internet en jóvenes

“La sociedad está alarmada por el tiempo que pasan los jóvenes en redes sociales y demandan información”, explica la directora de la Unidad de Conductas Adictivas de Vigo, Carmen Guimeráns. Por ello, con fondos de la Consellería de Sanidade, han puesto en marcha un programa de prevención del mal uso de Internet entre los chicos de 15 a 25 años en colaboración con los médicos de familia de los centros de salud del área. Asvidal ha formado a los facultativos –por ahora, en la ciudad de Vigo, pero se extenderá al área– para asesorar a las familias que les trasladen esta preocupación en sus consultas y darles las herramientas adecuadas. También les han indicado las claves para realizar una detección precoz de “posibles malos usos” de las nuevas tecnologías. La unidad, integrada en el Sergas, tiene capacidad para tratar los casos que se generen. Además, han puesto a disposición de los médicos un teléfono específico para ayudarlos con información concreta o para citaciones rápidas. Guimeráns cuenta que las alertas se encienden cuando un chico, por su enganche a la red, deja las actividades que le resultan placenteras, duerme poco, empeora su rendimiento escolar... El castigo o amenazas como “Te quito el móvil”, deben desecharse. “Ellos son nativos digitales. Comprenderlo, relaja el ambiente en casa y permite pactar su uso desde el diálogo. Y los chavales responden”, resalta.