Una supuesta agresión sexual a un menor de edad obligó a movilizar a la Policía Local este pasado domingo. Según informan fuentes policiales, fue el padre del niño, de solo 13 años, la que dio el aviso. Informaba a los agentes de que había sido víctima de un peluquero que se desplaza habitualmente a su casa. Tras finalizar este trabajo, el padre aseguró que, tapándole los ojos con una toalla, el hombre le habría sacado fotos e incluso comenzó a desabrocharle la cremallera del pantalón. El varón fue detenido por los agentes.