Guardia Civil y policías locales del entorno de Vigo realizaron durante este fin de semana controles aleatorios en diferentes carreteras en busca de posibles pistas de los miembros de la banda itinerante albanesa que se dieron a la fuga el pasado miércoles, cuando fueron sorprendidos robando en un chalé de San Andrés de Comesaña. Uno de los integrantes, de 32 años, pudo ser detenido y en la actualidad ya se encuentra en prisión. A este grupo del Este se le atribuyen 28 asaltos cometidos en Galicia en 2018 y ahora se investiga si son los autores de 30 más registrados en la ciudad olívica, Val Miñor y en otros municipios del sur de la provincia de Pontevedra.

Ésta es una de las épocas habituales en las que las bandas itinerantes suelen trasladarse a Galicia para cometer robos: durante los meses de noviembre y diciembre, a las puertas de las navidades. Precisamente, en 2019, cuando estaba a punto de concluir el año, hubo también un operativo policial contra otro grupo albanés que cometió medio centenar de robos. Un caso con varios investigados que ya está próximo a juicio.

Uno de los modus operandi que se utilizó en municipios próximos a Vigo durante estas últimas semanas fue el de entrar en los chalés por los balcones, de manera que, según fuentes próximas a la investigación, los asaltantes accedían a los pisos superiores de las viviendas para robar –dinero en efectivo o joyas– mientras los ocupantes de la casa estaban en el salón o la cocina, en la planta inferior, sin sospechar que había intrusos en el domicilio.