Un suceso ocurrido al filo del toque de queda que acabó con un herido de bala. La Policía Nacional de Vigo ha abierto una investigación para esclarecer lo sucedido el jueves por la noche en la parroquia de Lavadores, donde un hombre de 34 años recibió un disparo, por lo que tuvo que ser trasladado en ambulancia al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. Allí relató a los agentes que fue víctima de un atraco por parte de dos varones a los que conoce de vista y que, pistola en mano, le exigieron la cartera y su moto, tras lo cual, contó, uno de ellos intentó disparar sin lograrlo al encasquillársele el arma pero el otro sí que pudo usar su pistola, impactándole uno de los tiros en un brazo y el resto en el ciclomotor. Los atacantes se dieron a la fuga, al parecer en un coche oscuro. Los agentes indagaban ayer en esta línea de investigación para intentar dar con los autores, aunque sin descartar otras hipótesis sobre las causas de lo ocurrido.
La alerta saltó a las 22.30 horas. En ese momento el 112 recibía la llamada de una persona que avisaba de que necesitaba asistencia médica para un hombre que se encontraba en la avenida del Aeropuerto y que, aparentemente, presentaba dos heridas por disparos –finalmente se comprobó que era un único impacto–. El servicio de emergencias movilizó de inmediato al 061, así como a la Policía Local y la Policía Nacional, cuerpo este último que se hizo cargo de las pesquisas. En realidad los hechos no habrían ocurrido en el lugar desde donde se dio la alerta, sino a varios kilómetros de allí, en la zona de la calle Santa Cristina, a donde se trasladaron los agentes. Efectivamente, junto a un reguero de sangre que había dejado la víctima, recuperaron varios efectos de interés para la investigación, como un casquillo de bala y una mascarilla que a alguno de los implicados se le cayó en el transcurso del altercado.
Inspección ocular
Mientras una ambulancia de soporte vital avanzado se encargó de trasladar al herido al complejo hospitalario vigués, según confirmaron fuentes del 061, la Policía Nacional dio inicio a sus pesquisas. Junto a la inspección ocular realizada en la calle Santa Cristina y otro tipo de diligencias, los agentes se trasladaron asimismo al Cunqueiro para tomar declaración a la víctima. Al parecer, este hombre, que estaba con un amigo en el momento de los hechos, afirmó que los autores fueron dos hombres a los que conoce de vista y que, contó, pretendían atracarle. En su relato habló tanto de la calle Portela como de la de Santa Cristina donde los efectivos de la comisaría viguesa se encontraron los restos de sangre y, al parecer, habría mantenido un forcejeo con sus atacantes, que le acabaron disparando y posteriormente dándose a la fuga.
La víctima afirmó que los autores fueron dos hombres a los que conoce de vista
A media mañana de ayer todavía no se habían producido detenciones, si bien la Policía Nacional tenía avanzadas sus indagaciones, en las que trabajaba en varias líneas de investigación.
En el momento en que se produjo el suceso apenas había gente en la calle, ya que faltaba poco para las once de la noche, hora en la que arranca el toque de queda impuesto a causa del Covid-19. Este ataque con arma de fuego ocurre en una semana que estaba siendo especialmente tranquila. Prueba de ello es que en el juzgado que está de guardia, el Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo, solo pasaron a disposición judicial dos detenidos desde el martes: uno ese mismo día por un robo con violencia a un viandante y otro el miércoles tras ser sorprendido un ladrón forzando una máquina expendedora. Al margen de estos arrestos, hubo un juicio rápido por una alcoholemia positiva y dos requisitoriados.
