Si bien el cierre perimetral permite salir de Vigo hacia Nigrán, Mos, Redondela o Porriño, semeja que las limitaciones de movilidad se ejecutasen por barrios o parroquias. Y es que desde el inicio del fin de semana, coincidiendo con la entrada de las nuevas normativas y restricciones, Vigo dibuja varios escenarios completamente diferentes. Al cierre de la hostelería se le sumó al ayer el del comercio al ser domingo, lo que sumió todavía más en un paisaje de abandono todo el centro: tanto Urzáiz, como Casco Vello, Príncipe y calles aledañas lucían prácticamente desiertas durante la jornada a pesar de que el tiempo favoreciese salir a calle, y muy especialmente, sentarse a disfrutar del día con los convivientes. Solo algunos transeúntes puntuales que acudían a panaderías, pastelerías o establecimientos semejantes se dejaron ver por el entorno a lo largo de la mañana.

El cierre de la hostelería, salvo contadas excepciones de “take away”, vació por completo el barrio antiguo de la urbe, donde su estampa característica y tradicional bosquejaba hasta el viernes decenas de terrazas para disfrutar de un desayuno a media mañana o del vermouth de los domingos. Todo ello se ve ahora sustituidos por un café para llevar; eso sí, igual de bueno. “En Galicia en invierno salvo en la cafetería o en un bar no hay donde estar”, razonaba una vecina. Las opciones de muchos pasan ahora por colocar una pequeña barra o mesa en el entrada para dispensar estas bebidas a los clientes, si bien ayer encontrarse con alguno era anecdótico.

Sin embargo, el lienzo vigués era completamente diferente en cuanto uno se alejaba de la zona centro. No había más que mirar para Samil, donde el paseo así como el propio arenal fue el escenario escogido por cientos de vigueses para pasar una mañana en compañía de sus allegados, favorecido también por el tiempo que incluso permitió la salida del sol en varias ocasiones. Las canchas de baloncesto o simplemente un paseo fueron otros de los recursos al cierre de la hostelería.

Otros tantos se decantaron por una jornada más deportiva y como viene siendo habitual en domingos previos y siempre que la previsión meteorológica lo permite, el parque de Castrelos acogió también a familias enteras y runners que disfrutaron del aire libre y el paisaje otoñal que ofrece a estas alturas el parque.

Mercadillo

A no muchos kilómetros de distancia, en Bouzas, también el bullicio fue asiduo durante toda la jornada, especialmente por la mañana coincidiendo con la celebración de su mercadillo.

Durante el estado de alarma del mes de marzo, la venta ambulante fue suspendida por las medida de confinamiento, pero no ahora, lo que motivó que decenas de personas se desplazasen hasta la tradicional Vila para hacerse con víveres, flores, ropa o cualquier otro bien.

Esta situación contrasta con la de otros municipios del área de Vigo, como por ejemplo Baiona, donde sí está abierta al público la hostelería, lo que motivó a los residentes del municipio y visitantes a disfrutar de la jornada festiva.

Circular por la Avenida de Madrid, misión más que posible

Nadie sale a los pueblos o aldeas, ni a visitar a familiares de otros municipios no colindantes, ni tampoco a disfrutar del país vecino. Hacía días que contabilizar los coches que discurren a diario por la Avenida de Madrid no era tan sencillo como lo fue ayer. Las restricciones a la movilidad también se dejaron notar –y mucho– en el tráfico. Solía ser el domingo uno de los días de mayor congestión en la principal arteria de entrada y salida de la ciudad para disfrutar de la jornada festiva, pero el cierre perimetral la deja bajo mínimos. Ayer prácticamente no se registraron vehículos ya que el acceso a las zonas comerciales no tenía motivación alguna. El resto de viales urbanos o interurbanos también vieron caer el volumen del tráfico rodado, especialmente a lo largo de este fin de semana, ya que en jornadas lectivas el acudir a los puestos de trabajo, a los centros educativos así como todos los desplazamientos sanitarios o incluso recogida de pedidos sigue provocando retenciones circulatorias en alguna de estas vías.