Es una prestación “esencial” e “indispensable” para que “más de 120 usuarios, en su mayoría mujeres mayores que viven solas, no queden en la cuneta”. Son los argumentos esgrimidos ayer por el pleno del Concello de Vigo, para exigir a la Xunta que prorrogue “hasta el fin de la pandemia” el Servicio de Ayuda en el Hogar extraordinario puesto en marcha a comienzos de año para atender a personas vulnerables y que se clausurará, si no hay rectificación, el próximo 30 de noviembre. La propuesta, firmada por el grupo municipal socialista, encontró el apoyo de Marea de Vigo y del BNG, mientras que el PP optó por la abstención, no sin antes denunciar que el Concello no utiliza todas las horas asignadas por la Xunta para el Servizo de Axuda no Fogar (SAF).

La concejala de Política Social, Yolanda Aguiar, considera “inadmisibles” las razones esgrimidas por la Xunta para suspender este servicio, destinado a personas vulnerables que no pueden acceder al SAF ordinario. “Dicen que ya no concurren las circunstancias que dieron lugar a su creación, dicen que la gente ya no lo necesita”, cuando el Covid ataca con fuerza al área sanitaria en esta segunda ola de contagios. Recordó que aún hay muchos usuarios extraordinarios que “son personas confinadas o discapacitados y mayores que no acuden a los centros de día por miedo a contagiarse y que ahora quedarían en la cuneta” si no se prorroga este servicio especial.

Tanto Xabier P. Igrexas (BNG) como Oriana Méndez (Marea de Vigo) coinciden con el PSOE en la necesidad de esta prórroga, pero aprovecharon para cuestionar también la política municipal al respecto. Pérez Igrexas recordó que el SAF está gestionado por una empresa privada, del grupo DomusVi, al que pertenecen algunas de las residencias de la tercera edad que han tenido que ser intervenidas por la Xunta por la elevada tasa de contagios de Covid, mientras que la edil de Marea hizo hincapié en la “deficiente situación laboral” de las trabajadoras del SAF.

Por su parte, la concejala popular Patricia López Román, subrayó que la cobertura de la Xunta en esta materia “llega al 90%” de la población potencial, y el presupuesto “se ha multiplicado por cuatro desde 2009”, hasta sumar unos 450 millones. Además recordó que este SAF extraordinario “se aplicó cuando estaban cerrados los centros de día”, ahora ya abiertos, y reprochó al Concello que aplica cada “muchas menos horas” de atención en el hogar de las establecidas económicamente por la Xunta.

Esta postura “en defensa del Gobierno gallego en lugar de defender a Vigo” por parte del PP fue un constante reproche del grupo socialista en el pleno municipal de ayer. Así lo hizo en el debate de otras cuatro mociones (una de marea y las otras del PSOE) referidas a la defensa de la sanidad pública, la financiación de losa centros de día de Teis, Coia y Valadares, la compensación al Concello “por los gastos extraordinarios derivados de las actuaciones municipales para hacer frente al Covid” y para pedir los datos de la evolución de esta pandemia en Vigo. Todas fueron aprobadas con el único voto en contra de los cuatro ediles del PP y una última iniciativa socialista, para pedir a la Consellería de Educación que destine al menos 12 millones de euros a la reforma de centros educativas del municipio, salió adelante con la abstención popular. Durante el debate de este último punto, el concejal de Educación, Gorka Gómez hizo un comentario sobre la entrevista de FARO a la delegada territorial de la Xunta, Marta Fernández-Tapias, que la edil del PP Teresa Egerique calificó de “machista”, por lo que pidió su retirada de las actas.

La sesión, que incluyó un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas de la violencia machista, ratificó, por otra parte, los dos festivos locales de 2021: el 16 de agosto, día de San Roque, y el 16 de febrero, Martes de Carnaval, en sustitución de la Reconquista del 28 de marzo, que el próximo año coincide en domingo.

Elena Espinosa, refrendada como edil de Personal frente a las críticas de PP y BNG a su gestión

El pleno rechazó, con los votos en contra de PSOE y la abstención de Marea, una moción del PP, apoyada por el BNG, en la que pedía la reprobación de la gestión en materia de personal del alcalde, Abel Caballero, y de la edil Elena Espinosa, y la destitución de ésta. El portavoz del PP, Alfonso Marnotes, destacó la “inédita” unanimidad de los seis sindicatos representados en el comité de personal para denunciar “el caos” de gestión cuya “primera perjudicada es la ciudadanía”. El socialista Carlos López Font explicó que “el problema está en la otra parte”, en el comité de personal, “por sus disputas internas, sus intransigencias, falta de dedicación y de realismo”. Xabier P. Igrexas (BNG) dijo que existe “un problema de fondo”, que es que la concejala Espinosa “se convirtió en parte del problema” y el portavoz de la Marea, Rubén Pérez, ve “oportunista” la moción del PP y cree que sería “injusto” atribuir en exclusiva a una concejala el “problema serio” que existe en el Concello de Vigo.