Hace poco menos de una semana, el área sanitaria de Vigo era un claro ejemplo del buen hacer y cumplimiento de las medidas sanitarias, resistiendo a esta segunda ola como la segunda área gallega en mejor situación, solo por detrás de Ferrol. Pero fue llegar el primer festivo -el puente del Pilar- y descontrolarse la situación. El panorama epidemiológico es cada vez más preocupante y en los últimos siete días, los casos activos de coronavirus han pasado de 464 a casi 800, cifra no muy lejana al millar de contagios que se registraron en el mes de marzo, cuando la pandemia estaba completamente desatada.

Los datos facilitados por la Consellería de Sanidade correspondientes a este pasado domingo ponen el cierre a una semana negra en cuanto a contagios se refiere. Es más, solo durante el fin de semana, Vigo y el resto de municipios sumaron 200 nuevos casos, alzando al área sanitaria como la que más crece -y con mucha diferencia- de toda la comunidad: de los 417 positivos registrados el domingo en toda Galicia, uno de cada cuatro se corresponde con un habitante del área viguesa (98).

¿El motivo? Fuentes sanitarias señalan a las reuniones familiares y encuentros sociales como el foco de estos contagios. "No hay grandes brotes en empresas o en el ámbito industrial; según Medicina Preventiva están relacionados con el puente de el Pilar, que fue cuando hubo más reuniones, comidas, celebraciones, etc.", apuntó el gerente Javier Puente, quien reconoció que el área sanitaria se encuentra en un momento "complicado". "Se están produciendo muchos contagios, no estamos haciendo bien las cosas, y hemos descuidado las medidas de seguridad", amplió el directivo.

Estos 791 casos contabilizados el domingo provocaron que Vigo y el resto de municipios se sitúen ya como la tercera demarcación sanitaria en cuanto a número de contagios activos, superando a Santiago de Compostela (762), y solo por detrás de Ourense (1.516) y muy cerca de A Coruña (852).

Para tratar de poner freno a esta transmisión eminentemente comunitaria, la gerencia ya manifestó su intención de ampliar la práctica de PCR. Los laboratorios realizan más de un millar de estas pruebas al día, 114.135 desde los inicios de la pandemia además de otros 49.516 test serológicos, de los cuales solo el 8% son positivos.

Los municipios más afectados son Cangas y Nigrán, ambos en alerta roja, el máximo nivel. El alcalde de este último, Juan González, apostó por la tranquilidad pero sin olvidar la precaución. "Hemos suspendido las actividades culturales y medioambientales que teníamos previstas para el fin de semana; esto no es una broma. Confiamos bajar a los siguientes niveles de alerta pronto pero hay que tener más cuidado", matiza. Le siguen Vigo, Gondomar, Porriño y Salvaterra que, según el semáforo epidemiológico de la Xunta, se encuentran en un nivel de alerta alto. Baiona, Tomiño, Salceda, Redondela, Mos y Tui copan el color amarillo con entre 7 y 14 contagios en los últimos siete días. En el caso de este último, llama la atención la afectación del virus a los dos clubs de remo del ayuntamiento tudense -Club Remo Miño y Club Remo Tui-; ambos cerrados al detectarse positivos entre sus miembros.

El resto de municipios del área sanitaria de Vigo cuentan con un índice de contagios de menos de siete personas en la última semana, según fuentes del Sergas.