Conforme pasan los días, la situación epidemiológica en el área sanitaria de Vigo es cada vez más preocupante. Ya no es solo que haya nuevos contagios, es que los niveles de nuevas infecciones están llegando a niveles de marzo, cuando la pandemia estaba completamente desbocada. Según la última actualización de la Consellería de Sanidade, que se corresponde al pasado sábado, en Vigo se hicieron 1.560 nuevas pruebas PCR, de las que 101 arrojaron un resultado positivo. Es decir, en solo un día se confirmó el contagio de más de un centenar de personas, lo que supone el récord desde marzo. La situación se vuelve todavía más preocupante si se tiene en cuenta que esos 101 positivos en un día en el área viguesa es el mayor pico marcado en esas 24 horas en toda Galicia.

Esta avalancha de contagios ha provocado que los positivos activos asciendan en la ciudad y su entorno ya a 708, manteniéndose eso sí como la cuarta demarcación sanitaria de Galicia en cuanto a número de casos, por detrás de Ourense (1.577), A Coruña (839) y Santiago de Compostela (719). No había tantos pacientes con coronavirus en el área viguesa desde principios de mayo, cuando la curva estaba en clara tendencia descendente. Ahora, desde hace doce días, la curva va hacia arriba.

Esos 101 contagios en un día no se deben a ningún gran brote concreto sino que fuentes de la Consellería de Sanidade confirman que se siguen tratando de infecciones derivadas de reuniones familiares y encuentros sociales. Tanto en unas como en otros, las medidas de prevención se relajan, y en muchos casos, desaparecen. Sin mascarilla, sin distancia social y sin la pertinente higienización de manos, la transmisión del virus se descontrola. En los encuentros sociales se abarcan desde bodas hasta especialmente fiestas privadas de amigos, que han aumentado considerablemente desde el inicio del curso universitario. Pese a que la Policía Local está alerta para disolver este tipo de encuentros, lo cierto es que es imposible llegar a todos. Al final, todo depende de si los vecinos o los testigos alertan de la situación.

Precisamente, en relación a los universitarios, la Policía disolvió recientemente una fiesta en una residencia de estudiantes de la ciudad, con 18 jóvenes de entre 18 y 20 años apelotonados en una única habitación. Pero ya no son solo las fiestas. Los agentes tienen que intervenir constantemente en terrazas y en la vía pública para disolver encuentros de más de diez personas (el máximo permitido por las autoridades sanitarias), ya no solo por superar ese máximo, sino porque no guardan la distancia social y en muchos casos no llevan puesta la mascarilla. Hay que recordar que incluso en los locales hosteleros hay que llevar la mascarilla y solo se puede retirar en el momento de consumir.

Hay que destacar, por otro lado, que apenas se están detectando contagios en los entornos laborales, donde las autoridades sanitarias destacan que se están llevando a cabo, al menos en su mayoría, las medidas de prevención necesarias. Incluso en algunas fábricas de Vigo están obligando a los trabajadores a quitarse la ropa que traen del exterior y ponerse la indumentaria facilitada por la empresa antes de entrar en las instalaciones.

Con 112.913 pruebas PCR y 49.515 test serológicos realizados desde el inicio de la pandemia, el área sanitaria ha visto en las últimas horas cómo se alteraba el semáforo Covid. Así, el principal foco ahora mismo está en Cangas, que se encuentra en el máximo nivel de alerta, con más de 21 contagios en la últimas semana. Al segundo nivel asciende Porriño, que se sitúa junto a Vigo y Nigrán en el mismo escalafón epidemiológico. Hay que tener en cuenta, en este caso, que debido a su mayor población respecto a los otros municipios, la ciudad olívica se encuentra en este nivel de alerta con entre 166 y 332 contagios en la última semana, mientras que Porriño y Nigrán se sitúan entre 14 y 21 casos en siete días. Al primer nivel de alerta baja Tomiño, entran Tui y Salvaterra de Miño y se mantienen Gondomar, Salceda de Caselas y Mos, con entre 7 y 14 infecciones la última semana. La buena noticia llega desde Redondela, que sale del semáforo epidemiológico de la Xunta y, por tanto, mejora su situación en cuanto a incidencia del virus.