La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha absuelto a un acusado de abusar de su hija de cinco años. Los jueces consideran que no ha quedado acreditado que el sospechoso provacase el eritema que le fue diagnosticado a la menor en julio de 2017 en la cara interna de labio genital derecho.

El tribunal relata que la declaración presencial de la menor se sustituyó por la grabación practicada como prueba preconstituida. Sin embargo, indica que la reproducción de esa prueba "resultó imposible, pues resultaba inaudible, siendo además la visualización muy deficiente, lo que impedía también percibir con claridad y nitidez las reacciones de la menor". Los jueces afirman que, debido a ello, se encontraron "con una gran dificultad para llegar al pronunciamiento de condena pretendido por las acusaciones, como es la ausencia del testimonio de la víctima".

Los magistrados aseguran que les "extraña" que las acusaciones, "ante los problemas técnicos de la grabación desde prácticamente el inicio de la investigación", no propusieran la declaración de la menor. El tribunal entiende que no cuenta "con la prueba fundamental", que es el testimonio de la menor, y resalta que el resto de pruebas presentadas por las acusaciones son "insuficientes para enervar la presunción de inocencia que protege al acusado".