El trágico accidente mortal ocurrido en la AP-9 el 29 de mayo de 2019, en el que fallecieron tres jóvenes de 17 años y otros dos sobrevivieron, entre ellos el conductor, que en esa fecha tenía 18 años, ya tiene sentencia. La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo condenó al piloto del Peugeot 206 causante del accidente por un delito de homicidio por imprudencia menos grave a la retirada de su permiso de conducir los próximos 15 meses así como una multa.
La Fiscalía solicitaba para el joven la pena máxima que se le puede aplicar a este tipo penal que era 18 meses de retirada del permiso y 2.700 euros de multa por tres delitos de homicidio por imprudencia menos grave. La magistrada, por la contra, entiende que al tratarse solo de una familia la que ha decidido denunciar y por lo tanto incoar el procedimiento penal (en caso de que no hubiese denuncia, el caso se habría archivado) el conductor solo podía ser condenado por un único delito y no por los tres requeridos.
Los hechos se remontan un año atrás. El joven conductor relató lo sucedido en un escrito de alegaciones que presentó ante el juzgado y que fue leído por la magistrada durante la vista, celebrada el pasado 23 de septiembre. Cuando iban los cinco amigos en el coche por la AP-9 hacia Vigo notó algo "extraño", como pasar por un resalto, y que el Peugeot 206 empezó a ir de un lado a otro hasta que perdió el control. Asumió las conclusiones del equipo DIRAT de la Guardia Civil de Mérida, que indica que el vehículo iba a 138 km/h en el tramo anterior al siniestro y a entre 117 y 129 km/h cuando se marcó en la vía la primera huella de fricción. Todo el tramo está limitado a 100.
La defensa, que solicitaba su absolución, apuntó también a un informe pericial de la compañía aseguradora, según el cual la bionda "debería haber aguantado el impacto del coche" y devolverlo a la carretera. El joven también se disculpó con las familias de sus amigos fallecidos.
