Los alojamientos de Vigo se llenaron de pasajeros que tenían previsto iniciar en el 'Siboney' sus viajes a Cuba. En los muelles se quedaron 1.200 personas, según los datos oficiales. Muchos vecinos de la ciudad acogieron durante varios días a esas personas. La empresa consignataria ya había decidido que otro barco, también de gran tamaño, se desplazara hasta Vigo para recoger a todos los pasajeros. Pero tardaba varios días. Los vecinos de la ciudad mostraron una vez más su hospitalidad y no dudaron en ayudar. La compañía les mostró su agradecimiento cuando pudo recoger a los viajeros.

La Sociedad de Caza y Pesca logró los permisos para que 26 de sus socios pudieran cazar durante dos semanas en las islas Cíes. Para elegir a los afortunados se realizaría un sorteo La caza en las islas Cíes ya estaba muy controlada en esa época, pero todavía se realizaba durante algunos periodos de tiempo. Las islas eran vigiladas por la Guardia Civil.