La temida vuelta al colegio, que está ya a la vuelta de la esquina, preocupa especialmente a los padres de los alumnos. Más allá de que exista un protocolo sanitario estricto para evitar contagios, lo cierto es que se percibe un importante nerviosismo. También en Vigo. Por eso en los últimos días los pediatras de los centros de salud están atendiendo constantes consultas de personas preocupadas por enviar a sus hijos a las aulas. Algunos facultativos también están ya recibiendo solicitudes de certificados que permitan eximir a los alumnos de ir a clase. Pero los pediatras advierten que ellos no están obligados a emitir ningún tipo de documento de ese tipo. Por eso defienden que solo emitirán informes médicos que justifiquen ausencias escolares en "casos excepcionalísimos", es decir, en aquellos niños que presenten alguna patología grave (cáncer, operaciones cardíacas recientes, etc.).
Ante las dudas que han surgido en las últimas semanas en el ámbito de Atención Primaria respecto a estos certificados, el Colegio de Médicos de Galicia ha emitido una circular en la que recuerda que "no existe la obligación" de que los pediatras emitan esos documentos solicitados por los padres o por los tutores legales del niño. La entidad va todavía más allá, y explica que "el médico no está capacitado para hacer justificante escolares, de asistencia o no a los centros escolares". "Las ausencias solo pueden ser autorizadas o justificadas por sus tutores legales. Los padres son los únicos responsables de las acciones, incluso de carácter penal, de sus hijos menores". Por eso, inciden, los facultativos de Atención Primaria no tienen la responsabilidad de justificar faltas escolares.
En otras palabras: el pediatra puede emitir un informe que indique la situación clínica del menor, pero en última instancia serán las autoridades educativas y sanitarias las que determinen si ese niño puede ir o no a clase.
"A los padres les estamos diciendo que los niños deben asistir a su centro escolar, solo no deben hacerlo en casos grave", explica Emilia Formigo, pediatra del centro de salud de Lavadores que en los últimos días ha recibido varias consultas de padres preocupados por la vuelta a las aulas. Otros tutores legales también se muestran inquietos por el hecho de que sus hijos tengan que ir al colegio cuando conviven con personas mayores o personas que pertenecen a algún colectivo de riesgo.
"Nosotros solo les podemos asesorar, al final todo depende de los padres o de los tutores legales. Pero está claro que no vamos a hacer informes médicos que justifiquen que no vayan a clase por una bronquiolitis o cualquier otra patología leve", explica Luciano Garnelo, pediatra en el centro de salud de Pintor Colmeiro. Este facultativo de Atención Primaria tiene claro cuál es una de las medidas que hay que tomar para este curso: "Hay que hacer un llamamiento masivo para que todos se vacunen de la gripe". Y es que este año hay una especial preocupación para cuando llegue el pico gripal, que se prevé para noviembre o diciembre, y que coincidirá con el coronavirus.
Ante la inminente apertura escolar en España, la Asociación Española de Pediatría ha elaborado un manual con recomendaciones acerca de la reincorporación al colegio de los niños con enfermedades crónicas (cardiopatías, inmunodeficiencias, patologías hepáticas, procesos tumorales...) que se irán revisando en función de la situación epidemiológica de cada momento. Así, por ejemplo, para alumnos que tengan cáncer y que se encuentren en tratamiento, a la espera de ver la evolución de los contagios, se les recomienda solicitar la escolarización domiciliaria.
De todas formas, salvo para estos casos graves, lo que se recomienda en todo caso a los niños en esta vuelta a las aulas es extremar las recomendaciones generales para no contagiarse: evitar el contacto físico entre personas fuera del núcleo familiar, uso de mascarilla, mantener la distancia de seguridad de al menos dos metros y un lavado continuo de manos. Esa vuelta presencial a las aulas se realizará el próximos jueves 10 de septiembre en todas los niveles de educación obligatoria. Las guarderías públicas y privadas arrancaron con su actividad ya esta pasada semana.
