Mucho antes de que el coronavirus dejase tiritando la parrilla de vuelos de Peinador y el aeropuerto se quedase sin ninguna conexión internacional, en las pistas de Vigo aterrizaban y despegaban aviones de dos aerolíneas internacionales. Ambas de origen extranjero. Ambas con rutas que conectaban la ciudad con otros países. La más ligada históricamente a la terminal olívica fue TAP, de bandera lusa. Entre julio 2016 y octubre de 2018 sus aviones enlazaron Vigo con Lisboa, una ruta que ya había operado décadas antes. La segunda, la irlandesa Ryanair, se estrenó en Peinador en enero de 2016 y hasta que lo dejó, en mayo de 2019, fue sumando vuelos con Barcelona, el mercado inglés, el británico y el italiano.
Ambas comparten otra característica: su salida de Vigo En el caso de TAP, su decisión llegó después de que el alcalde de Oporto lanzase duras críticas a la compañía por la competencia que -aseguraba- ejercía la ruta Vigo-Lisboa sobre Sá Carneiro. En el caso de Ryanair, la partida se produjo porque la low cost no llegó a un acuerdo con el Concellolow cost para renovar el convenio firmado en 2015. El Gobierno local consideraba inasumibles las condiciones de la irlandesa, que habría llegado a pedir casi el triple de dinero a cambio de vuelos a Madrid y Londres, pero sin aumentar el número de plazas en Vigo.
Otra de las exigencias del Concello que complicó el acuerdo con la low cost es que la ayuda debía sacarse en un concurso público y abierto. "Lo que pretende Ryanair es intolerable", llegó a censurar Caballero, quien desde ha acusado en varias ocasiones a la Xunta de pagar a la low cost para que opere desde Lavacolla. Durante años -al menos entre 2005 y 2013-, San Caetano repartió nueve millones para apoyar la operativa de Santiago y una de las grandes beneficiadas fue la firma irlandesa.
Ahora las dos "ex" de Peinador mantienen una disputa que se promete tensa al otro lado de la Raia. Y el motivo de la discordia es, precisamente, el apoyo con fondos públicos en Portugal a TAP. Apoyo que en este caso llega en un momento delicado, cuando el sector lidia con la incerteza generada por el Covid-19.Ayudas públicas en Portugal
La decisión del Ejecutivo luso de apoyar con a la aerolínea portuguesa no ha gustado ni un pelo a la low costEl presidente ejecutivo de Ryanair, Eddie Wilson, ha concedido entrevistas a varios medios lusos en las que tacha sin paños calientes de "escandalosa" la postura de Lisboa. "La idea de que los contribuyentes portugueses tengan que pagar 1,2 mil millones para mantener una compañía aérea que tiene un color especial en la cola es escandaloso", insiste Wilson a la agencia Lusa. El grupo irlandés ya se ha dirigido al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
"Si el Gobierno portugués tiene 1,2 mil millones de euros para compañías aéreas lo que debería haber hecho era abolir las tasas en los aeropuertos portugueses en los próximos tres años y fomentar que las compañías traigan más tráfico", abunda el alto directivo de la low cost, quien no duda en tachar la posición del Ejecutivo de Lisboa de "antieuropea y anticompetitiva". "La capitalización de TAP va a ser el mayor desperdicio de dinero de Portugal", llega a recalcar el directivo de la firma irlandesa .
Sus críticas van más allá y alcanzan incluso al papel de Bruselas. "Las ayudas estatales deben ser accesibles para todos. Así hay una distorsión del mercado", señaló Wilson a ayudasExpresso La low cost ha llevado su reclamación ante el Tribunal de Justicia Europeo por el visto bueno de la Comisión a apoyos estatales para seis empresas y señala casos como el de TAP o SATA. "Lo que la Comisión hace es un enorme error para la competitividad a largo plazo. Creemos que nos dará la razón", insiste Ryanair.
Además de cargar contras las ayudas a TAP, Wilson deslizó a los medios portugueses que la low costcon la vista fija en los costes. "Estamos evaluando en estos momentos", anotó sin entrar detalles, aunque sí recalcó el peso de Ryanair. "Nadie estaba disponible para viajar desde Oportocuando Ryanair llegó", apostilló.
