Las taquillas de la estación de tren de Guixar de Vigo amanecieron ayer cerradas después de que se confirmase el positivo en Covid-19 de un trabajador de Adif en la noche de ayer lunes.
El diagnóstico obligó a confinar a cinco empleados de Renfe que compartieron turno y espacio con el contagiado en las mismas dependencias, que se encuentran a la espera de que el Sergas determine si se les realiza PCR. Habitualmente en caso de no percibir síntomas, solo permanecería aislados el tiempo correspondiente.
Las llegadas y salidas de trenes no se han visto afectadas y a los viajeros se les ha dado la opción de adquirir su billete en la estación de Urzáiz o en el propio tren. Muchos de ellos pudieron obtener sus billetes a través de las máquinas dentro de la misma estación ayudados por otros empleados de la compañía ferroviaria. En cuanto a la desinfección, labor diaria en dichas instalaciones, se reforzó a principios de la tarde para poder abrir las taquillas lo antes posible.
Al tratarse de un año con menos viajes y menos horarios, el trabajo de taquillas también se redujo de forma notable, pasando de las operaciones habituales a las escasas cien que se están realizando en pasadas jornadas.