Vigo estrenó ayer la primera calle financiada -en su gran mayoría- por capital privado, que une Barxa do Covelo y Gandarón. La vía, ubicada en las proximidades de la avenida de Madrid, fue visitada ayer por el alcalde, Abel Caballero, los ediles de Urbanismo y Fomento, María José Caride y Javier Pardo, y el empresario José Manuel Fernández Alvariño, al frente de Alvariño Inversiones, la firma que aportó más del 60% del presupuesto de la actuación. En total 250.000 euros salieron del bolsillo de la firma, por los 150.000 que desembolsó el Ayuntamiento.

Caballero consideró ayer el entendimiento entre las partes como un "buen" modelo de cooperación" público-privada", que ha permitido ahorrarse al Ayuntamiento 250.000 euros. La calle tiene 103 metros de longitud, cuenta con dos carriles de circulación y aceras de casi dos metros. Conectará una zona de naves industriales junto a la avenida de Madrid.