La ría amaneció ayer cubierta por un manto de niebla y un descenso de temperaturas que pone el contrapunto a un verano récord, con apenas lluvia y el mercurio alcanzando cada dos por tres valores próximos a los 30 grados. Según las mediciones realizadas por Meteogalicia en su estación del centro de Vigo, desde el 21 de junio solo se registraron tres días con precipitaciones, tres jornadas durante las que se acumularon apenas 1,8 litros por metro cuadrado (l/m2), un valor testimonial.

El último día que el sensor anotó lluvia fue el 29 de junio. Algo similar ocurre con el termómetro. En julio la ciudad vio como hubo 14 jornadas en las que el mercurio se elevaba por encima de los 30º. La máxima -alcanzada el jueves 16- escaló incluso a 34,8º.

El panorama con el que se despertaron los vigueses ayer poco tiene que ver con ese balance de verano. La ría amaneció bajo una densa niebla y a media tarde Meteogalicia informaba de valores máximos de apenas 20,5 grados, muy por debajo de las temperaturas sofocantes que llegaron a marcar los termómetros en julio. La red de cámaras que el observatorio autonómico tiene desplegadas por la comarca reflejan que la bruma no solo se extendió por el municipio de Vigo. Los visores instalados en Baiona, Cangas y la playa de Rodas, en Cíes, muestran que arrancaron el día entre intensos bancos de niebla. El parte de Meteogalicia para los próximos días anticipa valores de entre 16 y 27º y algunas nubes, aunque sin lluvia.