Todo apuntaba a que la obligatoriedad de las mascarillas en el arenal traería dos consecuencias inevitables: o descendería la afluencia a los arenales o las infracciones por no llevar esta medida de protección despuntarían. Pero a tenor de los primeros datos facilitados por la Policía Local, parece que el civismo se ha impuesto a las previsiones. Y es que desde el viernes y durante el pasado fin de semana, los agentes municipales solo han impuesto un total de 60 denuncias frente a los miles de bañistas que durante toda la jornada se acercaron a alguno de los arenales del municipio vigués, que fueron vigilados y controlados constantemente por efectivos locales.

Estas actuaciones fueron aplaudidas por el propio alcalde de Vigo, Abel Caballero, quien destacó el buen funcionamiento del sistema de seguridad en las playas. Según expuso, la Policía Local informó del cumplimiento de las normas por la mayor parte de los bañistas en las playas a pesar de que tuvieron que imponer 60 denuncias durante el fin de semana por el uso de la máscara de protección.

Caballero detalló que los agentes impusieron 10 denuncias el viernes, 39 el sábado y 11 el domingo, "un número muy reducido en función del número de ciudadanos que debía cumplir con el deber de llevarla".

Así, considera el regidor "muy bueno" el funcionamiento del sistema de seguridad sanitaria en las playas de la ciudad durante este pasado fin de semana así como el mantenimiento de las distancias de seguridad.