El aumento generalizado de nuevos positivos por Covid-19 ha provocado ya en varios puntos de la geografía española el confinamiento total de sus vecinos o la regresión a fases menos restrictivas. Y es que ante el temor de un nuevo estado de alarma, muchos vigueses han decidido poner fin a sus estancias fuera del municipio y regresar para evitar que un posible nuevo confinamiento no les pille en otras comunidades. Un buen ejemplo de este medidor son los trenes que discurren entre la capital madrileña y la ciudad condal, que hasta la primera semana de agosto tiene colgado el cartel de completo.

Todos aquellos que quieran llegar desde Barcelona a Vigo en tren no podrán hacerlo hasta el día 6 de agosto, ya que la línea diaria que comunica ambas ciudades tiene todas sus plazas cubiertas. Semejante situación se vive en los convoyes entre Madrid y la urbe olívica. Hasta el martes 28 no hay posibilidad de regresar en tren, y para esa jornada solo restan siete vacantes en uno de los enlaces. Los días 28 y 29 la ocupación roza ya el 70% mientras que agosto comienza con todos los viajes ya completos.

¿Y los que se van? Aquí es donde se nota una pequeña diferencia con respecto a la vuelta. Mientras las líneas Vigo-Barcelona están también prácticamente llenas- solo restan plazas en tres jornadas pero en todos se supera el 90% de ocupación-, los enlaces con Madrid no van tan completos. Por ejemplo, solo los días 26, 27 y 2 de agosto están completos. Para el resto de jornadas todavía restan vacantes pero no en gran medida: 33 plazas hoy, 79 el día 28, 60 el día 29, 7 el día 31 y 100 el próximo 1 de agosto.

Hay que matizar también en el caso de los enlaces a Madrid que el número de trenes y horarios se redujo a consecuencia de la pandemia, así como varios enlaces habituales, por ejemplo las líneas con Bilbao, que está inoperativas.