Las multas, del tipo que sea, serán recordadas sin duda como algo inherente a la crisis sanitaria del coronavirus. Primero fueron las sanciones a quienes se saltaron el encierro domiciliario del estado de alarma. En Vigo se contaron por miles. Y ahora llegan las denuncias por no utilizar la mascarilla. El decreto de la Xunta que obliga a usarla salvo muy contadas excepciones entró en vigor la medianoche del sábado para el domingo. Y ya en este primer fin de semana la Policía Local denunció en la urbe olívica a 10 personas: siete jóvenes que organizaron una competición de rap -las denominadas "batallas de gallos"- y tres viandantes.

El alcalde, Abel Caballero, destacó que la norma se cumplió "muy bien" en general. Y citó estos casos como excepcionales. Los chicos de la "batalla" de rap, junto a no hacer uso de la mascarilla, carecían de permiso para el evento y no guardaban distancia. Se cursó sanción porque, pese a las advertencias policiales, "no fueron receptivos" a ellas. Igual que los tres transeúntes multados, que reaccionaron con "cierta agresividad verbal".

El regidor mostró su "total respaldo" a la norma de las mascarillas y avisó de que hay que cumplirla "rigurosa y taxativamente". "En Vigo vamos a ser inflexibles" en lo relativo al uso de esta protección, dijo. Porque lo que está en juego, añadió, "es la vida de la gente". En este sentido, pidió a los responsables de los establecimientos hosteleros que tengan "mucha atención" para que en sus locales haya un "cumplimiento estricto" de esta obligación.

Tras la entrada en vigor del decreto ya se empezaron a registrar en la Policía Local llamadas de ciudadanos que denuncian a otros a los que ven sin esta protección. Un fenómeno que se vio en el confinamiento con los que acabaron bautizados como "policías de balcón" por delatar a quienes salían a la calle pese a las restricciones. Ayer hubo una llamada avisando de gente sin mascarilla en la playa de Samil o de adolescentes jugando sin ella con globos de agua en una plaza, si bien, al llegar los agentes, los chicos sí las llevaban puestas.