Sobre las 17:30 horas de la calurosa tarde de ayer, las personas que se encontraban en la playa de Ríos de la ETEA, unas 50, dieron aviso a la Policía Local de la aparición de un vertido de aguas fecales en el mar.

Una vez alli, los agentes observaron grumos compactos de color marrón flotando dispersos en el agua, y recomendaron a los bañistas que saliesen del agua ante la posibilidad de contagio de enfermedades o posibles infecciones.

El vertido afectaba a la zona de la ETEA. La Policía Local dio aviso a la Consellería de Medio Ambiente y se recogieron muestras para su análisis en el laboratorio municipal, mientras se investiga su procedencia.