Las confluencias de Podemos en Galicia llegaron a su techo histórico en las elecciones autonómicas de 2016 bajo el nombre de En Marea. Consiguieron por aquel entonces ser la segunda fuerza en Vigo con 41.062 votos, casi el 30% y solo superado por el PP y muy por encima del PSOE y del BNG. Aquello queda ya muy lejos y la izquierda rupturista desaparece ahora del Parlamento gallego tras concurrir a las urnas el pasado domingo bajo el nombre Galicia En Común-Anova Mareas y perder en la ciudad 32.816 votos. La caída también es pronunciada si se toman como referencia los resultados de las últimas generales de noviembre de 2019, en las que Galicia En Común estaba integrada exclusivamente por Podemos y Esquerda Unida. Anova y las mareas de Santiago y A Coruña, que en estas autonómicas viajaban en la coalición, no se presentaron a aquellos comicios.

El baile de siglas y la extrema división en sus filas, que culminó el año pasado con el anuncio de que Luis Villares y sus tres diputados afines de En Marea en el Parlamento gallego se pasaban al grupo mixto han abocado a la izquierda rupturista, al menos en estas últimas autonómicas, a la irrelevancia política y a ser una fuerza extraparlamentaria, con todo lo que ello conlleva.

Ayer se reunió la coordinadora gallega de Esquerda Unida para valorar la situación y estudiar los resultados y mañana la coordinadora local de Vigo celebrará un encuentro. "Tenemos que escuchar a la militancia y asumir responsabilidades. Hemos cometido muchos errores en esta campaña y también durante estos cuatro años en el Parlamento de Galicia. Hemos frustrado a un electorado que antes estaba muy ilusionado con nosotros y hemos vuelto a la situación previa al 15-M", explica el portavoz de Esquerda Unida y de Marea de Vigo, Rubén Pérez.

El "descalabro sin paliativos" de las confluencias de Podemos en la ciudad olívica se produjo en todos los distritos electorales. Fue superado por el BNG en todos los barrios, incluso en Navia, donde Podemos tenía una especie de bastión al ser una población muy joven. Rubén Pérez reconoce que sus votantes se han ido al Bloque.

La falta de confianza en Galicia en Común, según Rubén Pérez, también puede tener que ver con la coalición que gobierna el país, donde está Unidas Podemos. "Pese a avances importantes como el Ingreso Mínimo Vital y toda la gran labor que está llevando a cabo Yolanda Días como ministra de Trabajo, el hecho de tener que hacer frente una pandemia como la que estamos atravesando, confinamiento incluido, marca y desgasta mucho", reconoce.

Pérez también considera que la perspectiva de los próximos cuatro años para Galicia no es la mejor con la cuarta mayoría absoluta de Feijóo. "Puede significar un proceso de privatizaciones de servicios públicos al ser su última legislatura y la oposición no tendrá capacidad de modulación. Tendremos que poner en marcha la movilización social para detener esa ola de privatizaciones que puede llegar", advierte.