A los responsables de la discoteca de la calle Areal en la que tuvo que actuar la Policía Local el pasado fin de semana para desalojar a unas 200 personas -más de dos tercios del aforo permitido- que bailaban sin mascarilla y sin respetar las distancias interpersonales no les saldrá gratis su descuido. Se enfrentan a una sanción, aunque, por ahora, se desconoce quién tiene que aplicarla: si el Concello o la Xunta.

Fuentes municipales señalan que los agentes elevaron a la Xunta la queja al actuar en virtud de la Lei de espectáculos públicos e actividades recreativas de Galicia, que contempla desde multas nimias a cuantiosas, incluso recoge la posibilidad de ordenar el cierre temporal del local, todo en función de la calificación de dicha infracción. Por ello, defienden que la administración gallega debe ser la que determine la sanción en cuestión.

Sin embargo, fuentes del organismo autonómico detallan que la aplicación de las sanciones les compete a los concellos. "Así se lo comunicó la Xunta a las entidades locales. Según se recoge en la Ley 8/2008 de salud de Galicia, los alcaldes y alcaldesas tienen la condición de autoridad sanitaria y, por tanto, deben garantizar los derechos y deberes sanitarios de la ciudadanía", puntualizan antes de añadir que, en la misma norma, también se recoge que "los municipios tienen competencias de control sanitario de actividades y servicios que impacten en la salud de sus vecinos, de los lugares de convivencia humana y para la ordenación y control de dominio público".

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, aseguró que la Policía Local permanecerá "muy atenta" para detectar incumplimientos: "No nos temblará la mano al tomar decisiones: el Covid está muy cómodo en lugares cerrados y con mucha gente".