Las restricciones al tráfico rodado en accesos a zonas de playa no provocaron colapsos en las vías locales, pero sí en la centralita de la Policía Local de Cangas. Hasta 90 llamadas recibió la patrulla que estaba de guardia a lo largo de toda la jornada de ayer. Y mientras era evidente el tránsito de gente a pie para acceder a las playas, en las vías provinciales y autonómicas se estacionaban los vehículos como se podía, y algunos llegaron hasta el monte en zonas de la parroquia de O Hío.

En la Policía Local de Cangas se recibieron quejas de que este trasiego de gente a pie era peligroso y que iba a acabar con algún atropello. El teléfono sonaba constantemente y los agentes no hacían otra cosa que atender llamadas, la mayoría para preguntar si podían o no pasar a determinada zona en coche. .

No hubo multas ayer. Era lo que se esperaba. Aún no están entregadas todas las tarjetas y, además, la Policía Local de Cangas no dispone en estos momentos de personal suficiente para atender zona urbana y zona de playas. Eso será el día 10, cuando regresen de la Academia Galega de Seguridade los guardias contratados (12 en total). Y en medio del aluvión de llamadas por el asunto playas, una de un accidente en la subida de Areamilla, en las inmediaciones del restaurante Casa Simón.