La procesión del Cristo de la Victoria no se celebrará este año tras más de 200 años ininterrumpidos. El Concello y la Diócesis de Tui-Vigo han convenido que, de acuerdo con las normas establecidas en el decreto que regula la nueva normalidad, no se lleve a cabo uno de los actos más multitudinarios y emblemáticos de la ciudad olívica. Por primera vez en la historia, las calles de la urbe no se llenarán de devotos acompañando el avance de la imagen en el primer domingo de agosto, una escena estival habitual que, a causa del patógeno, al igual que ya ocurrió con los actos Semana Santa, no se presenciará en 2020.

La Cofradía ha optado por la "prudencia" para "garantizar la seguridad" de los asistentes a uno de los eventos que más gente reúne de Galicia. "Hemos sopesado muchísimo la decisión y esperado hasta el último momento para ver cómo se desarrollaban los acontecimientos. Siempre se juntan muchísimas personas, se llegó en alguna ocasión a 200.000. Es una de las procesiones a nivel europeo que más fieles congrega con un solo paso", aseguraba ayer el secretario de la entidad, Carlos Borrás, quien confiesa que toman esta decisión "con muchísimo dolor", pero conscientes de que es la alternativa más segura.

Los responsables de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Vitoria trasladaron ayer al alcalde, Abel Caballero, la determinación de no organizar este año la procesión debido a la situación sanitaria que estamos atravesando por el coronavirus. Caballero mostró su apoyo a la decisión de suprimir por primera vez en la historia esta procesión. Al encuentro, asistieron la presidenta de la entidad, Marora Martín-Caloto Alonso; el párroco, Moisés Alonso; el secretario, Carlos Borrás; y el vicepresidente, José Ricardo Troncoso.

"La Cofradía quiere destacar del encuentro la colaboración total y el interés mostrado por el Concello para que todo transcurra de la mejor manera posible poniendo a disposición de la Cofradía recursos para optimizar el buen desarrollo de los actos que sí van a tener lugar", apostilla la entidad en un comunicado remitido ayer a los medios.

Y es que, además del pregón, confirmado por el alcalde, se celebrará el novenario adecuándose a las medidas higiénico sanitarias requeridas por las autoridades competentes y garantizando la distancia de seguridad entre los asistentes: el aforo en la Concatedral de Vigo estará limitado a un máximo de 80 personas. Para facilitar el seguimiento de los cultos a quienes no puedan acceder al templo, la Cofradía del Santísimo Cristo de la Victoria, con la colaboración del Concello de Vigo, retransmitirá en directo vía Internet la novena de las 20.00 horas desde el próximo viernes 24 de julio a través de sus canales de comunicación online, redes sociales y página web (www.cristodevigo.es).

La misa solemne tendrá lugar el domingo 2 de agosto a las 11.00 horas, con el aforo reducido y, al igual que ocurrirá con el novenario, será retransmitida en streaming para que pueda ser presenciada telemáticamente por los fieles que no estén en el templo.

En el comunicado, la Cofradía quiere recordar que, el próximo viernes 31 de julio, se realizará la tradicional imposición de medallas a los nuevos cofrades y anima a formar parte de la misma a los que quieran serlo. Hasta la fecha citada, está abierto el plazo de inscripción.

La salida de la Borriquita

La Cofradía del Silencio solicitó a finales del pasado mes de marzo, días después de decretarse el estado de alarma, trasladar las celebraciones y procesiones de la Semana Santa a septiembre -entre ellas, la salida de la Borriquita-, petición que debe contar con la bendición del Obispado. Por ahora, no se conoce si se llevará a cabo esta iniciativa. Fuentes de la entidad religiosa avanzan que informarán sobre la cuestión más adelante.