Nuevo capítulo animalístico en Vigo y otro episodio que lleva la palabra abeja en su título. La Policía Local de la ciudad olívica ha intentado retirar del motor de un vehículo estacionado en el barrio de Navia, un nido de estos insectos que -no se sabe desde cuando- decidieron establecer su vivienda en la cara interna del capó del coche.

El susto se lo llevó el propietario del vehículo que, el pasado 21 de junio, acudió al lugar en el que estaba estacionado. Fue entonces cuando comprobó que por las ranuras de la parte delantera del coche entraban y salían abejas sin parar. Pronto dio aviso a la policía que acudió hasta el punto en cuestión para ayudar al desalojo de los insectos.

Pero la intención se quedó en eso. El vehículo, que presumiblemente llevaba tiempo estacionado en la calle, se había quedado sin batería y esto hacía imposible que se pudiese abrir el capó. Ante la incapacidad de echar a las abejas, los agentes emplazaron al propietario del coche a que cuando solventase los problemas eléctricos volviese a contactar con ellos para acudir en su ayuda.

La Policía Local ha recordado que las enjambraciones de abejas, como la que se registró en la playa de Samil en plena desescalada en Vigo, suelen ser habituales de épocas calurosas y se producen cuando los zánganos siguen a una reina sin fecundar que abandona la colmena vieja.