La tercera fase de la desescalada judicial llega hoy. Junto a la reincorporación del 100% de la plantilla de funcionarios, la gran novedad es la llegada de los turnos de tarde a los juzgados de Vigo, algo excepcional. El criterio para fijar este horario extraordinario no tiene que ver con la carga de trabajo, sino con garantizar que se cumplen las distancias entre los trabajadores y, con ello, las medidas de seguridad sanitarias para plantar cara al Covid-19. Y, tras revisar los espacios de trabajo, la Dirección Xeral de Xustiza de la Xunta concluye que en la urbe olívica podría ser necesario que parte del personal trabaje por las tardes en 15 dependencias de los edificios de calle Lalín: se trata de 12 juzgados, Fiscalía, Imelga (clínica forense) y servicio de notificaciones y embargos (éste se ubica en el Casco Vello).

Todas estas salas y servicios son aquellos, dice la Xunta, "donde no se pueden cumplir las medidas de seguridad" establecidas por el Ministerio de Justicia, por lo que hay que dividir al personal mañana y tarde. Aclara, en todo caso, que, entre las dependencias identificadas, el turno de tarde podría evitarse "en algunos casos" según el número de funcionarios que opten por el teletrabajo, al que puede acogerse hasta el 40% de la plantilla de cada órgano.

Con estas condiciones, los juzgados susceptibles de tener turno de tarde, junto a Fiscalía, Imelga y la oficina de embargos, son los siguientes: los juzgados de Primera Instancia 5, 7, 8, 10 y 12 (dos de ellos de Familia); los de Instrucción 2, 6 y 8; el Penal 3; los de lo Social 3 y 4 y el de Violencia sobre la Mujer.

Sindicatos

Alternativas na Xustiza criticó ayer que la Xunta sigue sin apostar por el "papel cero" y el teletrabajo, que hay muchos juzgados sin mamparas o que las mascaras faciales distribuidas no cumplen las medidas de seguridad: "son lamentables". El sindicato STAJ no ve necesarios turnos de tarde y en el caso de Vigo cree que la cuestión de las distancias podría solucionarse con mamparas y mostradores para atender al público, que aún no colocaron. Critican también la calidad de los EPIs.