Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Vigo reactiva la autopista del mar el jueves con un buque y dos frecuencias semanales

Suardiaz reanuda el servicio solo a Francia y mantiene en 'stand-by' la ruta a Tánger a la espera de que despegue la producción de PSA y Renault en España y Marruecos

Un buque Ro-Ro operando en Bouzas. // R. Grobas

Vigo recuperará su autopista del mar el próximo jueves; eso sí, con menos frecuencias semanales y operada por un único buque. Suardiaz, la naviera que explota el servicio de supercarretera marítima entre Bouzas y Nantes-Saint Nazaire, con su extensión no subvencionada a Tánger, ha programado la primera de las escalas para el día 21, en la que embarcarán vehículos de PSA-Vigo rumbo a Francia para su posterior distribución. Durante un tiempo que dependerá de la evolución de la actividad en la planta de Balaídos, habrá barco los jueves y los lunes, frente a las tres frecuencias semanales actuales; operará un único buque y no dos, y solo en la ruta a Saint Nazaire: Tánger se mantiene en stand-by.

La actividad de la autopista del mar está estrechamente relacionada con la producción en PSA-Vigo, que retomó el montaje de vehículos el pasado miércoles y que prevé restablecer el turno de noche a partir del día 25, como avanzó FARO. La incorporación de más equipos y la subida en cadencia (el número de coches que se producen por hora) dependerá, como recordó el propio director de la factoría, Ignacio Bueno, de la evolución de las ventas, y la autopista del mar, también. Pese a la diversificación de la carga realizada por Flota Suardiaz para no depender exclusivamente de los tráficos de PSA, lo cierto es que solo la producción de Balaídos aporta el volumen de carga suficiente para hacer rentable esta supercarretera del mar.

EN DIRECTO

Coronavirus en Galicia: última hora

Sigue las noticias sobre la incidencia de la pandemia del Covid-19 en la comunidad

Los planes de Suardiaz son reiniciar el servicio el día 21 con dos frecuencias semanales (lunes y jueves), frente a las tres habituales (lunes, miércoles y viernes-sábado), y con un buque Ro-Ro. Operará además solo la ruta Vigo-Nantes Saint Nazaire, dejando aparcado por ahora el enlace a Tánger hasta que despegue la producción de PSA y Renault en España y Marruecos (Kénitra y Tánger). Los casi 700 coches que producirá al día PSA-Vigo durante las próximas semanas son insuficientes para asegurar la operatividad de dos buques por semana. A mayores, la planta gallega ha extremado el control de calidad de los vehículos, tanto en Balaídos como a pie de muelle, para asegurar al máximo su fiabilidad después de dos meses de parón por la crisis del Covid-19, según ha podido saber este periódico.

La terminal, vacía

La imagen que ofrece esta semana la terminal de Bouzas, con apenas coches tanto de PSA como de otras marcas, contrasta con el lleno absoluto de la campa de Gefco en As Gándaras, en Porriño, donde se concentra la producción de Balaídos con destino al mercado nacional y que tras el confinamiento ha ido acumulando cerca de 8.000 vehículos pendientes de destino. La estampa boucense cambiará sobre todo desde finales de mayo y principios de junio, cuando, si el mercado lo permite, PSA-Vigo ya estará trabajando a tres turnos en las dos líneas.

El impacto del Covid-19 en la economía viguesa, donde la mitad de los asalariados está todavía en ERTE, se nota y mucho en los tráficos del Puerto vigués, con excepción del movimiento de contenedores, que sí ha aguantado el tirón gracias a la fruta y la entrada de materia prima para la industria agroalimentaria. La pesca ha sufrido más y el tráfico rodado prácticamente cayó a cero, obligando a suspender el servicio de la autopista del mar y el resto de conexiones que distribuyen los coches de PSA por los cinco continentes. De hecho, el coronavirus truncó el mejor primer trimestre portuario en años, impulsado sobre todo por la industria del automóvil, cebándose además en el negocio de los cruceros, con escalas ya canceladas hasta el verano y pocos visos de que se pueda recuperar en el segundo semestre del año con la incógnita de si habrá nuevas oleadas de virus a partir del próximo otoño-invierno.

Compartir el artículo

stats