La hostelería viguesa empieza a sacudirse la escarcha de los últimos dos meses, durante los que el estado de alarma obligó a buena parte de los establecimientos de la ciudad -salvo los que podían repartir comida a domicilio- a cerrar sus puertas y dejar en suspenso su actividad. El inicio de la fase 1 de la desescalada ha permitido a bares, cafeterías y restaurantes dar una primera bocanada de aire y montar sus terrazas, aunque con importantes restricciones aún que limitan su aforo máximo al 50%, establecen estrictas medidas de higiene y desinfección y regulan las distancias entre los clientes. Aprovechando el inicio de la fase, algunas terrazas de la ciudad se montaron ya el lunes. Desde la federación provincial de hosteleros (Feprohos), su presidente, César Sánchez-Ballesteros, explica sin embargo que hay negocios que se están "preparando" aún para sumarse a lo largo de los próximos días. Para el fin de semana estiman que se habrán reactivado cerca del 50% de las terrazas del centro de Vigo al menos entre las que tienen mayor capacidad y están en sitios amplios.
"Este fin de semana habrá muchas más de las que se ven ahora", explica el responsable de Feprohos. La meteorología se aliará con los planes del sector. Tras un arranque de semana marcado por las nubes y los chubascos, Meteogalicia El sábado la probabilidad de lluvias descenderá hasta el 5% y las temperaturas máximas se elevarán a los 26º. Una de las terrazas más amplias y con mayor aforo de toda la ciudad, la de la cafetería Portobello -situada en la parte baja del centro comercial A Laxe- ultimaba ayer detalles para abrir sus puertas mañana por la mañana. Lo hará -explica Rubén Pérez,- con cerca de 30 o 40 mesas, todavía muy por debajo de las 150 que puede llegar a sumar entre sus diferentes zonas. Los planes del negocio pasan por una reapertura con concierto incluido.
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"Hay que ser prudentes"
Una de las principales preocupaciones del sector es sin embargo compaginar la desescalada y progresiva vuelta a la normalidad con las medidas de higiene que han permitido combatir la expansión del Covid-19. El lunes -primer día de la fase 1 y de tímida reapertura de las terrazas- Feprohos detectó "incumplimientos de la normativa" que regula las distancias y aforos. "Pueden perjudicar a todo el sector. Confiamos en que hayan sido una excepción y, por el bien de todos, no se vuelvan a repetir", remarca la federación: "Tenemos que ser muy prudentes y cumplir estrictamente las medidas higiénico-sanitarias y de seguridad para evitar futuros rebrotes y seguir avanzando en la desescalada".
Sánchez-Ballesteros explica que el lunes se vivieron situaciones como que -debido a la escasez de plazas a causa de la reducción de los aforos- las mesas se ocupasen antes de que se pudiesen retirar las copas, vasos y platos de los anteriores clientes o desinfectar el mobiliario. El sector reconocía ayer su "preocupación" y llamaba a la responsabilidad. "Nuestro fuerte es la seguridad", reivindica Feprohos. Para remarcarlo, el propio colectivo, a través de Hostelería de España, ha lanzado el distintivo "hostelería segura", que además de la acreditación incluye un pack integral de servicios y productos, y cursos.
La paulatina vuelta a la normalidad llega acompañada también de dilemas. Uno de los más importantes que afronta la hostelería afecta a sus tarifas: ¿Deben repercutirse sobre los precios los gastos a mayores en los que están incurriendo los negocios para mejorar su desinfección y limpieza? En un momento en el que los hosteleros tienen sus finanzas tocadas tras dos meses de gastos sin ingresos, ¿cómo afrontar nuevos costes, como mascarillas, hidrogeles y pantallas, con los precios de siempre? El debate está sobre la mesa.
"Va a haber unos costes extras y tiene que repercutirse en el cliente de alguna manera. Habrá que analizarlo", reflexiona Sánchez-Ballesteros, quien apunta a una medida temporal. Desde Zona Náutico, Rubén Pérez señala que -dentro del propio sector- no afronta la misma situación una cafetería que un hotel, donde el refuerzo de la higiene requiere un desembolso mayor. Pérez apela en cualquier caso a la ayuda institucional para adquirir material. Ayer Zona Náutico firmó también un acuerdo con Fademga para fomentar el empleo de personas con discapacidad.
