La Policía Nacional ha detenido en Vigo a un taxista que reconoció hacer entregas de droga a domicilio porque, según alegó, está pasando por aprietos económicos debido a la caída de la actividad durante la cuarentena por la pandemia del coronavirus.

El taxista fue sorprendido en la madrugada de este lunes cuando regresaba acompañado de una mujer con amplios antecedentes por tráfico de drogas a su vehículo, que había dejado estacionado en doble fila y con los cuatro intermitentes puestos. Los agentes registraron el taxi, en cuyo interior encontraron casi 350 euros que estaban semiocultos, así como cuatro papelinas de cocaína escondidas en el cenicero.

El taxista reconoció de forma espontánea que está pasando por una mala racha y que de vez en cuando lleva alguna entrega al domicilio de algún comprador, como acababa de hacer cuando fue interceptado, y que cobra tanto la carrera como el material entregado.

Esta detención se produjo en la Travesía de Vigo, en la zona conocida como edificios de Fenosa, donde apenas una hora y media antes habían sido detenidos un hombre de 45 años y una mujer de 37 también por traficar con droga.

La Policía Nacional tenía constancia de un repunte de la compraventa de estupefacientes en esta zona en las últimas semanas, tras recibir numerosas llamadas de vecinos.

Tras ser sorprendido, el varón intentó huir y, al ser alcanzado, agredir a los agentes que lo perseguían. Durante el trayecto a comisaría golpeó el vehículo policial y se produjo daños por los que tuvo que recibir asistencia médica.

La mujer, por su parte, arrojó al suelo varias bolsas con droga, tanto heroína como cocaína, y se guardó tres en la boca, aunque finalmente las acabó entregando a los agentes.

La Policía ya había requisado a esta mujer cinco papelinas de cocaína ocultas en un bote de lentillas el 12 de abril, y al día siguiente, dos papelinas de la misma droga. Tras consultar las bases de datos, los agentes constataron que al varón le constan 24 detenciones previas y a la mujer, seis.