Uno de los proyectos estratégicos del Puerto, avalado por la primera industria de Vigo, PSA, y clave para ganar líneas de atraque y espacio para los tráficos Ro-Ro, se cae. "Ya no está sobre la mesa", reconoció ayer el presidente de la Autoridad Portuaria. Praza da Estrela dejó entrever tras la reunión del primer consejo de administración del ente telemático por el Covid-19 que pese al estudio en profundidad encargado para diseñar la ampliación de la terminal de transbordadores, concebido para ganar espacio y adaptarse a las necesidades futuras del sector y que puedan atracar los nuevos megabuques Ro-Ro, el proyecto ha quedado en suspenso. "Hay posibilidades pero de momento no se ha elevado ninguna propuesta concreta al consejo", zanjó Enrique López Veiga.

El presidente portuario no avanzó las razones por las que se frenaba esa nueva ampliación de Bouzas, aunque el escenario incierto que está dejando el Covid-19, que ha desplomado los tráficos de automóviles y la posterior crisis económica que se avecina, podrían tener algo que ver. El proyecto se había concebido sobre unas previsiones de crecimiento de PSA-Vigo y del conjunto del sector de las cuatro ruedas que, al menos a corto y medio plazo, no se cumplirán. No habrá récord de producción este año, y probablemente tampoco en 2021, según indicaron fuentes del sector a FARO, que alertan de que esta crisis puede ser mucho peor que la financiera de 2008 para la primera industria del sur de Galicia.

Solo hay que ver los datos del puerto, que tras firmar el mejor primer trimestre de los últimos doce años empujado por la automoción ha visto cómo la parálisis del sector y el confinamiento por el Covid-19 han invertido la situación, castigando sobre todo a la industria y al tráfico de cruceros, del que López Veiga tiene dudas de que pueda recuperarse en un horizonte próximo. "Quizá sea (marzo) el último mes en que podamos sonreír", lamentó el máximo responsable de Praza da Estrela.

El consejo de administración del Puerto se reunió hoy por primera vez de forma telemática y entre los temas que se trataron destaca también la posibilidad de que la Autoridad Portuaria incurra en pérdidas en el año 2019 después de que la Intervención General del Estado instase al Puerto a computar como provisiones por pérdidas la primera subasta de parcelas en la plataforma logística, a la que solo acudieron 4 empresas con un precio medio del metro cuadrado de 50 euros, por debajo de coste. La Autoridad Portuaria discrepa en este punto. Provisionando el total subastado las pérdidas serían de 500.000 euros para el ejercicio 2019; de lo contrario, habría beneficios por 2,3 millones de euros.