Tres emprendedores procedentes del ámbito de la ingeniería fundaron Muutech hace tres años para ofrecer a las empresas una plataforma tecnológica desde la que controlar todas las etapas del negocio. En 2018 fueron seleccionados por la aceleradora BFA de Ceaga, PSA y Zona Franca y trabajan con empresas de la automoción, las telecomunicaciones o la distribución de todo el país. Su innovador producto es una solución ideal en tiempos de confinamiento.
- ¿Es posible monitorizar desde casa todas las actividades de una empresa?
-Toda o casi toda y sea cual sea la naturaleza de la empresa. La dependencia de internet es cada vez mayor y una empresa industrial, por ejemplo, cuenta con máquinas conectadas a la red de telecomunicaciones, autómatas inteligentes o medidores de consumo sin cables. Todos estos elementos son susceptibles de ser monitorizados y de ellos se puede sacar información de forma relativamente sencilla. Y en un proveedor de venta online o de servicios informáticos, la infraestructura principal la constituyen todos los elementos informáticos, servidores, ordenadores, routers, etcétera, que son los encargados de que las personas puedan realizar su trabajo. En ambos ejemplos, todos los elementos mencionados son críticos para la correcta operación de las empresas y han de ser monitorizados de forma rigurosa.
-¿Cómo puede ayudar tanto a las empresas que prestan servicios críticos de telecomunicación como al resto de sectores?
-Ayuda a las empresas a tener en tiempo real una visión de los elementos críticos, ya sean máquinas o comunicaciones, sin importar el lugar donde se encuentran ni su fabricante. Y a tomar decisiones con esta información. La monitorización es un trabajador más, un controlador que vigila que todo se comporta correctamente. No es necesario tener una persona que esté todo el tiempo controlando que las cosas funcionan, sino que es la monitorización la que se mete en las "entrañas" de los elementos y, a partir de la información recopilada, actúa en consecuencia. También permite correlacionar información de distintas fuentes, inicialmente inconexa entre sí. Además, la monitorización no es simplemente un elemento pasivo que avisa de eventuales problemas, sino que es capaz, por sí misma, de actuar, por ejemplo, reiniciando un servidor si la memoria se dispara, o apagando una máquina si el consumo y la temperatura aumentan de forma considerable. Y así evitar un cortocircuito que pueda provocar un incendio.
- ¿Han intensificado la monitorización sus clientes actuales?, ¿se ha incrementado el interés de posibles usuarios?
-Como primer paso, las empresas están concentrando sus esfuerzos en implementar estructuras de teletrabajo lo más rápido posible. Y, en este caso, los elementos críticos de la infraestructura son los servidores y las conexiones de red. Por esto, una vez que hemos instalado el teletrabajo, e independientemente de la empresa o el sector, la monitorización cobra todo el sentido del mundo. Como segundo paso, necesitarán herramientas de monitorización para ayudar a esos empleados a controlar los procesos y sistemas desde sus casas, sin necesidad de tener que ir a la fábrica u oficina, siendo mucho más eficientes y concentrándose en lo que realmente tiene importancia. Con respecto a la situación actual, muchas empresas nos están contactando para la monitorización de sus equipamientos de red y sistemas de telecomunicaciones, principalmente. Esto abre una ventana de nuevas posibilidades y oportunidades de negocio, que no nos esperábamos, y que puede ser muy positiva para nuestro crecimiento.
- ¿Estas soluciones están al alcance de las pymes? En estos momentos, adecuarse al confinamiento e implantar el teletrabajo está siendo un reto para ellas.
-Absolutamente. En nuestro caso, ofrecemos la monitorización como un servicio y el cliente solamente paga por los equipos y máquinas críticas que monitoriza. El coste es bajo y tiene el control desde el primer día. Nosotros nos encargamos de poner a funcionar todo el sistema sin que el cliente tenga que preocuparse por nada. Y todo esto, por supuesto, de forma remota, por lo que se evitan los contactos y desplazamientos innecesarios.
- Los expertos advierten de la necesidad de incrementar la ciberseguridad en estos momentos, ¿el control remoto ayuda?
-Puede ser considerado como un elemento más en la ayuda contra la ciberdelincuencia. Si tenemos toda nuestra infraestructura TI (Tecnología de la Información) monitorizada, somos capaces de ver en tiempo real si se producen anomalías como un consumo de red poco habitual, un aumento de sesiones de usuarios en una aplicación, una descarga de documentos masiva, o un acceso a ficheros restringidos. Son indicios de que algo no está funcionando correctamente y puede ser debido a un ciberataque. Además, la monitorización permite controlar que todos los equipos y personas que están teletrabajando tengan la última versión del antivirus activa, que el firewall de la empresa esté activo y funcionando, que el número de sesiones activas sea el adecuado y que el rendimiento de los equipos es el correcto. Y, en caso contrario, dispararía una alarma al responsable de sistemas que se encargaría de resolver la incidencia, también en remoto, evitando así una posible brecha en la seguridad.
