Sergi Monferrer, director general de Buny, la única empresa de patinetes de alquiler que ha tenido presencia en Vigo, asegura que ha presentado cuatro instancias para solicitar la recuperación de los patinetes que tiene requisados en los garajes del Concello. "Estamos a la espera", afirma. Monferrer explica que desde hace un mes los VMP de su empresa han dejado de operar a la espera del concurso que prepara el Concello. El parón le obligó a aplicar la tijera. De los 16 contratados que decía disponer en la ciudad, ahora se ha quedado con solo dos. En su haber, estima en "casi 10.000" los usuarios que emplearon sus servicios en Vigo, "de los cuales un 60% fueron recurrentes", es decir, repitieron. Por otro lado, Monferrer se muestra proclive a que el patinete "se asemeje lo máximo a la bicicleta" en términos de regulación y elogia la iniciativa del Concello en el carril-bici. Sobre los patinetes sujetos al mobiliario, matiza que su plataforma multa con 20 euros si los usuarios reinciden (la primera vez solo se apercibe). Para evitar esto, los usuarios deben acreditar con una foto el depósito de los VMP.