El colectivo de trabajadores de autoescuelas de la provincia de Pontevedra protagonizó ayer un paro de tres horas ayer para denunciar el incumplimiento de su convenio y las condiciones laborales "insostenibles" que padecen.

Convocada por el sindicato CUT, la jornada de protesta incluyó una marcha de vehículos que salió de Travesía de Vigo y terminó ante la delegación olívica de la DGT, en Regueiro. Una de las portavoces de los trabajadores, Erika Otero, explicó que es el inicio "de la lucha" contra la precariedad que afecta a este sector, en el que trabajan más de un centenar de personas en la provincia.