Irreverente hasta en la última despedida. Así es el Entroido y con este espíritu celebraron ayer los vigueses el punto y final de seis días de fiesta y desenfreno. Tristes pero sabiendo que en un año volverán a lucir sus disfraces y máscaras por las calles de la ciudad.

Las exequias funerarias y solemnes arrancaron en Porta de Sol, de donde partió el desfile de acompañamiento de las comparsas y de la comitiva fúnebre. Como marca la tradición, sus integrantes respetaron la etiqueta de luto riguroso y ocultaron su pena con sombreros y gafas oscuras. Pero sus inconsolables llantos también iban acompañados de sonrisas, pues el Carnaval hay que saborearlo y disfrutarlo hasta el último aliento.

La curiosa comitiva portaba una imagen con el rostro del alcalde y sospechosos sacerdotes bendecían al respetable con un orinal.

Ganadores del concurso de comparsas

El sepelio del Meco se llevó a cabo con todos los oficios laicos, responsos y sermones en Porta do Sol, donde se leyó el acto del jurado del concurso de comparsas y carrozas y se procedió a la entrega de premios para tratar de suavizar, en lo posible, tanto dolor por la despedida entroideira.

El primer premio, dotado con 3.000 euros, fue para Os festeiros polo aire, de la Asociación Os Festeiros de Bembrive, cuyos miembros recogieron su diploma acreditativo de manos del alcalde.

A Vila, de la Asociación A Vila, obtuvo el segundo puesto y los correspondientes 2.500 euros. Y Gran Estreno Aladdin Pexegueiro, de la Asociación Entroido de Pexegueiro, se quedó en el tercer lugar y recibió 2.000 euros.

Además, el jurado decidió otorgar 14 accésits dotados con mil euros, por este orden, a las comparsas de la Asociación recreativa y cultural Barca de Loimil, Os da Casa, Beirán, Parda do Miñor, Luces de Tomiño, A Pandilla, Ldanzia de Gondomar, Os Campechanos, O millor de cada casa, Os Brincadeiros, Atlántida de Matamá, Novo Vigo, Terra de Condes, y Centro Veciñal e Cultural de Valladares.