Los vecinos de Bouzas empiezan a vislumbrar ya una de sus principales demandas históricas: un centro de salud. El Sergas ha arrancado en las últimas semanas las obras del ambulatorio, que estará ubicado en las inmediaciones de la Alameda, entre las calles Suárez Llanos y Ferreiros. El plazo de ejecución es de unos catorce meses, por lo que los plazos marcados por la administración sanitaria van cumpliéndose y las instalaciones estarán operativas en el primer semestre del próximo año.
Después de varias modificaciones en el proyecto para adaptarse a las exigencias de Patrimonio, el centro de salud albergará finalmente tres consultas de medicina y otras tantas de enfermería, además de una sala polivalente destinada a diferentes usos. El ambulatorio estará en disposición de tener tres equipos formados por médico y personal de enfermería por la mañana y otros tantos por la tarde. Esa sería su capacidad máxima y llegar a ella dependerá de la cantidad de la cantidad de cartillas sanitarias que acoja el nuevo centro. Porque los vecinos que se trasladan actualmente a Navia, Coia, López Mora o Rosalía de Castro a ser atendidos no estarán obligados a cambiarse para el ambulatorio boucense, sino que será un trámite voluntario.
El centro de salud constará de dos volúmenes constructivos, con dos plantas cada uno, que se comunicarán mediante una galería. Ambos edificios sumarán una superficie total de 860 metros cuadrados.